El nuevo camino apunta a una revisión profunda de sus armas, a las que se les puede dar una nueva oportunidad en el campo
Se está pasando el tiempo, y en el Bernabéu aún no hay certezas en el puesto de ataque. No se sabe quién será el sustituto de Benzema, ni la segunda arma de ofensiva para la parcela más adelantada en el terreno de juego. Luka Jovic ha sido el señalado, pero contando con el pobre rendimiento reciente, a muchos aún les quedan serias dudas.
No obstante, hay un hecho crucial que ha abierto otros escenarios. Y es que el entrenador merengue, ha decidido curiosamente tirar abajo la oferta que tenía a Jovic casi instalado en Milán. Ha reaccionado a tiempo y ha evitado que el futbolista serbio se marchase a la Serie A, dejando como resultado la continuidad del punta de cara al siguiente curso.
La confianza entra en pleno, un momento de reflexión profunda que tiene como respuesta la entrada en vigencia
Si de remplazo para Jovic se habla, hay que decirlo, es el propio Jovic. No entra en los planes directivos hora mismo entrar a negociar con futbolistas de élite, que como la historia lo exige, deben ser los que estén en esa zona del campo. Confían en el talento del futbolista y en que haya superado finalmente el proceso adaptativo, llegando a plenitud de condiciones y con la confianza expuesta del cuerpo técnico pueda rendir.
Le han llevado desde Alemania justamente porque es el delantero en proyección detrás de Erling Haaland mejor dotado técnicamente. Tiene un golpeo de balón excepcional, y un sentido de ubicación que le permite estar siempre en la zona de influencia. Además, es propiedad del club, les costó 60 millones y tiene solo 22 años.
Zidane no tiene dudas que el futuro será más promisorio que lo visto hasta acá
Muchos lo comparan con Robert Lewandowski, el delantero más letal de Europa. En lo técnico no tiene nada que envidiarle, y la proyección a futuro es su argumento más sólido. Momento para ir al frente, demostrar lo que tiene y salir del ostracismo. Depende de él y así se lo han dejado ver sus jefes inmediatos.
Pero no todo es responsabilidad propia, se debe incluir el gran nivel de Benzema, inapelable si se quiere para todos en Madrid. El delantero galo con su elevado prestigio no le ha dado opciones a nadie, proclamándose el mejor jugador del equipo y el goleador de los suyos en la temporada. Fundamental en el título de Liga, ha sido el eje de la confianza de Zidane, que ahora pretende tener mayores recursos en sus manos. Pendientes.
