Tiene la vista fijada en dos objetivos, ambos juegan en el rival que enfrentarán en los octavos de la Liga de campeones
Zinedine Zidane sigue planeando a futuro la plantilla del Real Madrid. No es un entrenador que se quede observando el panorama, sin acabar este curso ya ha ido mostrando a sus jefes la dirección correcta a la que apuntar una vez el mercado de pases de apertura oficial en verano. Pues bien, tiene dos objetivos, ambos juegan en el Manchester City de Guardiola y en eso se proyecta.
El primero de ellos es Leroy Sané, un extremo de perfil zurdo alemán que apenas tiene 24 años. No ha podido jugar esta temporada debido a una grave lesión, y cuando todo indicaba que la cosa mejoraría, ha recibido en contra la noticia de la sanción por parte de la UEFA a su club. En jugadores de tanto prestigio este es todo un hito, no hay uno solo que se quiera quedar fuera de la máxima competencia de clubes en el continente.
Sané, incluso llegó a rechazar una enorme oferta que el Bayern Múnich de su país natal le llegó a plantear el verano pasado. Argumentando siempre el deseo por triunfar vestido de skyblue, ha dejado todo a merced de esta campaña. Ahora, casi recuperado y con el panorama despejado, se contempla el hecho de salir, pero con Valdebebas en su radar.
De Bruyne es ahora mismo el más buscado en Madrid
Y si a esta lluvia de especulaciones le faltaba algo, eso mismo se lo inyecta Kevin de Bruyne. Dueño de unos registros maravillosos, este belga de 28 años es y ha sido el valor más relevante en la campaña de los citizens. Es el capataz de este equipo, y con 2.550 minutos sobre el campo, ha logrado meter 7 tantos y dar la no despreciable suma de 18 asistencias.
Para Zidane es un jugador muy interesante, más que nada porque sabe y conoce de la posición, te juega a dos áreas y es un visionario del juego. Tenerlo en el centro de la cancha garantizaría muchas soluciones, y tendría de paso el beneplácito de una afición que poco a poco va entendiendo mejor las formas que pretende hallar su entrenador con el paso del tiempo.
El tema ahora mismo es el valor, pero nadie da por sentado nada, quedarse sin jugar la Champions durante dos años y la posibilidad de irse a jugar a cuarta división, podría terminar con la plantilla que posee ahora mismo Pep. De Bruyne ve con buenos ojos el acercamiento del Real Madrid, está en plena etapa de madurez, y quiere por su puesto, ganar los trofeos más importantes del mundo, justo donde tiene más posibilidades.