Es un crack a toda luz, juega en Inglaterra y tiene unas estadísticas bastante bondadosas de su lado
Hace un tiempo ya que vienen tambaleando ciertas alas en el Real Madrid. Florentino Pérez con sus ideas institucionales, y Zidane bajo los esquemas lineales de lo estratégico y deportivo. Ya han chocado, y se ha visto en el caso reciente de Paul Pogba. Ahora todo se ha extendido hasta otros nombres de gran peso como Kylian Mbappé, a quien esperan cerrar como gran abanderado en 2021, y Sadio Mané, la petición inmediata.
Precisamente el tema del senegalés del Liverpool es el que más aprieta la paciencia de unos y otros. Zizou ha quedado fascinado con su desempeño desde aquella final de Europa disputada en Kiev, incluso cuando la opinión en general ponderaba más la labor de su compañero de ataque, Mohamed Salah.
Un movimiento como ese significaba hacer sacrificios, por ejemplo salir de Gareth Bale, cosa que hasta acá el presidente no ha permitido. Todo esto ha generado un ambiente tenso y se ve hoy en día, Zidane no tiene buena relación con su jefe, aunque éste pretenda cumplir su palabra de darle peso a las decisiones entre altas y bajas a su míster.
A Mané le quiere Zidane en el merengue antes de la llegada de Mbappé
El tiempo ha sido benévolo con toda decisión tomada por parte del entrenador galo. Primero en ser aguantado como director del barco, y segundo, con cada jugador reseñado. Mané le ha ganado el pulso a varios enormes futbolistas, y hoy es el activo más valorado de toda la Premier League.
Sin embargo, eso le ha hecho despuntarse en la cotización habitual del mercado, y hoy le sitúan en 180 kilos, una cifra bastante importante si es que pretenden armar un proyecto serio. En lo que va de temporada lleva un registro de 15 goles y 11 asistencias, todo una influencia de ataque para el líder infalible de la Liga más competitiva del mundo.
Además, se ha ganado el Balón de oro en África, ha quedado cuarto en la gala del Balón de oro de la FIFA y en cada equipo donde jugó marcó la diferencia. Es hábil, potente, veloz, tiene juego asociativo, juega por fuera, por dentro, recupera y tiene liderazgo. Tantas características están soportadas, Zidane lo pide ahora mismo y desde las oficinas en Concha Espina se trabaja para buscar efecto en ello.