Un enfrentamiento con sabor a final anticipada
Cinco años después de su único cara a cara a nivel de clubes, Erling Haaland y Kylian Mbappé vuelven a cruzarse en un partido de máxima exigencia. El choque entre Manchester City y Real Madrid en los playoffs de la Champions League no solo definirá el futuro de ambos equipos en el torneo, sino que también alimentará la narrativa de una rivalidad que promete marcar la próxima década del fútbol mundial.
Este enfrentamiento llega en un momento de incertidumbre para ambos clubes. El Manchester City, actual campeón de Europa, ha mostrado cierta irregularidad en la Premier League, quedando prácticamente sin opciones de revalidar el título. Por su parte, el Real Madrid, líder en LaLiga, aún no ha logrado imponerse con autoridad en los grandes partidos de la temporada, lo que genera dudas sobre su capacidad para afrontar citas de este calibre.
Un duelo con antecedentes en la Champions
El único antecedente entre Haaland y Mbappé en competición de clubes se remonta a la temporada 2019-20, cuando el Borussia Dortmund del noruego eliminó al PSG en octavos de final. En la ida, un doblete de Haaland en el Signal Iduna Park dio la victoria a los alemanes (2-1). Sin embargo, en la vuelta, el PSG remontó con un 2-0 en París, en un partido donde Mbappé fue suplente por molestias físicas y Neymar se erigió como la gran figura.
Desde entonces, ambos jugadores han seguido caminos distintos, pero igualmente exitosos. Haaland se consolidó como uno de los delanteros más letales del mundo, logrando su primer título de Champions League con el Manchester City la temporada pasada y estableciendo récords goleadores. Mbappé, por su parte, ha dado el esperado salto al Real Madrid, club que ha dominado la competición en la última década y donde busca afianzar su legado.
El peso de Haaland y Mbappé en sus equipos
Nadie concibe que el Manchester City pueda avanzar sin una actuación determinante de Haaland, ni que el Real Madrid logre clasificarse sin una exhibición de Mbappé. Ambos son los referentes absolutos de sus equipos y están llamados a decidir una eliminatoria que, aunque prematura en la competición, tiene todos los ingredientes de una final.
Este choque será la primera gran batalla entre los dos delanteros más dominantes del panorama actual. ¿Quién se llevará el primer asalto de una rivalidad que podría definir el fútbol de los próximos años?
