El presidente del Real Madrid quiere operaciones con saldo asumible para reforzar al equipo en tiempos de crisis
La historia es larga y ya por fin Zidane ha dejado en claro que no cuenta con James Rodríguez, el colombiano es parte de la maniobra del club para reunir fondos y acercar posturas pretendidas en el mercado de fichajes de verano. Real Madrid viene muy claro en ese sentido, pero es evidente que ha puesto la vara bien alta, 80 kilos por quien se lo quiera llevar y el trato está hecho.
Como ha sido de común conocimiento, han estado tras los pasos de Paul Pogba, el mediocentro francés que por estos tiempos sigue estando en fases de recuperación tras su cirugía de meniscos. Es el jugador ancla que en Valdebebas siempre han esperado y lo intentarán así algunos medios digan lo contrario. El acuerdo no ha estado sencillo, ni mucho menos las posturas han sido un tema de acuerdo satisfactorio, el valor de mercado del jugador ha puesto tantas trabas como uno se pueda imaginar.
Para ello se han planteado varias posibilidades, y la de vender para reunir fondos es la que más les llama la atención. James está en esa rampa de salida, y Wolverhampton es el más interesado. Los ingleses, que esta campaña han cumplido con un enorme desempeño, esperan mejorar su plantilla con jugadores del talento cafetero.
James es ahora una prioridad
Qué rápido van evolucionando las cosas. Hace tan solo unas horas James era un jugador del montón, al que el Real Madrid no le delegaba mayores elementos de influencia. Pero tras la primera oferta de los lobos ingleses, se ha reactivado un movimiento interesante dónde de nuevo toma el mando.
Su valor de mercado es muy importante, y con 80 kilos pueden ir al frente a por cualquier objetivo. Pogba es uno, y de 160 a 80 hay una diferencia determinante. Florentino Pérez lo tiene claro, con el aval del cuerpo técnico y con la necesidad evidente, se viene una orquestada muy acorde a las directrices que se han trazado.
Hasta acá lo dejan así, no se lo piensan dos veces, y mucho menos van a imponer inconvenientes corporativos. Ya se ha contactado a Jorge Mendes, el encargado de dar rienda suelta al movimiento de acá al menos al verano y las respuestas han sido satisfactorias. James podría estar experimentando su salida a la Premier League, una Liga de la que jamás ha escondido su admiración.