Una decisión interna que ya tienen en marcha parece ser el único camino
Liverpool tiene dentro de sus filas un jugador fetiche para Zinedine Zidane de cara al Real Madrid, se trata de Sadio Mané. El extremo de 28 años senegalés, es el jugador que quiere el estratega galo para el fortalecimiento de las bandas en ataque, donde tiene claras deficiencias tras los contrastes de Vinícius y las lesiones de Hazard.
Justamente este par de jugadores tienen todo el cartel para mostrar la ruta de salida. Si se vende a alguno de ellos tendrán mucho de dónde sacar ventaja tras el pedido extremo de los red, sobre los 150 millones de euros. Y justificados están, más que nada por su actualidad y esa cifra goleadora que no deja de sorprender a todos en Concha Espina.
Mané ha logrado conformar un tridente de ataque de plenas garantías junto a Mohamed Salah y a Roberto Firmino. La máquina de Klopp funciona como un relojito suizo, y de todos Mané es el más destacado. Goleador, veloz, contundente, y con sacrificio, además del manejo de los dos perfiles, por algo Zidane lleva ya dos temporadas tras sus pasos.
Klopp propone otra cosa en relación al tema Mané
En este caso hay dos cosas para analizar. Una es que no van a exceder los límites, el club está en crísis y alargar las maniobras tiene sus consecuencias. Para ello las ventas son necesarias, pero de ahí se desprende el otro punto sensible, las proyecciones con sus activos. Vinícius es la esperanza del club, y a Hazard lo acaban de fichar como la gran estrella.
Por eso Jürgen Klopp plantea una cosa distinta, que no afecte mucho a ninguno y que de paso les convenga a todos. Se trata de un truque por el extremo brasileño, tema que a Florentino sigue sin parecerle del todo viable. Según el entrenador alemán las cifras se ajustan, y a cambio el merengue se lleva un jugador hecho, que no tiene que demostrarle nada a nadie.
Hace poco Mohamed Sissoko hacía referencia al tema, y dejó caer que Mané jugará en el Real Madrid tarde o temprano. Con Vinícius están dispuestos a formar un proyecto y para eso no tendrían dudas en dejar salir a su estrella. Cabe resaltar que Liverpool acaba de quedar eliminado de la Champions, y aún tiene en juego el título de las Premier, donde aventaja por más de 20 puntos al segundo, el Manchester City.
