Acaba contrato y se va, al menos esa es la sensación que más fuerza toma en la actualidad
Casemiro se ha convertido en los últimos años en el jugador más valioso tácticamente para el Real Madrid. El líder del equilibrio es consciente que le queda poco tiempo en la capital, ya que acaba su contrato en 2021, y así tendría todo decidido para partir antes de ir perdiendo protagonismo en la que es y ha sido su casa siempre. Por ese motivo, el club se ha centrado en perfilar opciones, identificando en Kanté y Camavinga a las dos más cercanas para continuar el legado a nivel top.
Es claro que el brasileño lo juega todo, que no tiene re cambio y que el agotamiento parece ser mayúsculo. A día de hoy Zidane le confía lo más importante y basa sus opciones en lo que tiene para demostrar que el equipo es fuerte y que tiene sus intensiones claras. Pero no es suficiente, cuando no está lo sienten, y de lo que poseen no hay quien se le asemeje si quiera para sentar un precedente.
Quizás Fede Valverde, pero es un jugador de un corte mucho más mixto, con ida y con vuelta. A diferencia del brasileño pierde muchos balones, arriesga de más y no es tan posicional. Todo indica que un llamado de la Premier League le tendría en esta dubitativa actualidad, lo que es para él una oportunidad de oro para ir cerrando ciclos con mucho fútbol todavía por mostrar, pues tiene solo 28 años.
N’golo Kanté vuelve a escena una vez más
Son 3 años ya los que tiene Zidane tras los pasos del campeón del mundo con Francia en 2018. Su actuación en Chelsea le tiene prendado, es más, se ha arriesgado a catalogarlo como el mediocentro más importante del mundo, con mayor nivel y uno de sus objetivos a futuro. Pero no será sencillo sacárselo de las manos a los blues, pues piden una pasta, un valor importante.
En un comienzo se habían pactado llevar a cabo el trato hasta el verano del siguiente año, y una vez el brasileño dijera adiós. Pero como están las cosas, Zizou pone en contexto el tema, y prioriza el hecho de ponerle competencia para que su última estadía sea amena, con descanso y con las garantías que alguien durante estos últimos 5 años se ha ganado a pulso.
Ya para finalizar, el caso de Camavinga parece mucho más simple, ya que los emisarios que se han desplazado hasta Rennes para verle jugar han dejado las mejores de las sensaciones. Los acuerdos se han empezado a delimitar y si nada extraño ocurre, estaría firmando a final de temporada a cambio de unos 60 millones de euros. Camino libre, la era Casemiro parece haber llegado a su fin.
