A la derrota se le ha sumado un hecho curioso que los ha obligado a volver más tarde a casa
Sin duda ayer no fue el día para el Real Madrid, perdieron en su visita al Ciutat de Valencia por la mínima y ante el Levante, dejaron una mala impresión, perdieron la racha, y han cedido a manos del FC Barcelona el liderato de LaLiga. Todo se da justo antes del comienzo de un nuevo clásico, que ahora le hace llevar el mando el rival.
Una clara muestra que no siempre tener la pelota te hace ser peligroso. Real Madrid perdió claramente porque la actitud feroz del rival fue muy superior. Les atacaron los espacios vacíos, y hasta tuvo la chance de conseguir una que otra anotación más. Pero eso no fue todo, a los de Zidane se le alinearon varias cosas, y entre ellas estuvo el cierre del aeropuerto.
Por culpa de la niebla, el aeropuerto de Valencia tuvo que cerrar, lo que ha obligado a la delegación del Real Madrid a regresar hasta la capital en autobus. Una completa pesadilla que no ha terminado hasta que llegaron a casa, varias horas más tarde y con la necesidad imperiosa de tener que descansar pues se tiene a la vuelta de la esquina el choque ante el Manchester City.
Fue un día para el olvido. Los errores en el campo loas tuvieron que pagar con golpes muy certeros. Llegar al clásico dos puntos por debajo les hace jugarse un duelo aparte, un duelo en el que no pueden dar pelota por perdida ni mucho menos. Al FC Barcelona lo tendrán que salir a matar, si es que no quieren que les vaya a jugar una mala pasada la temporada misma.
Capitulo cerrado y concentración absoluta, Zidane cree que fue un accidente del que se deben reponer cuanto antes. El calendario y el presente no dan espera, el equipo debe reaccionar de inmediato, sumando argumentos deportivos para ir creciendo, y regresar a la racha positiva de resultados que lo tuvo una buena cantidad de día en lo más alto.