Jovic es el objetivo del Celta para reforzar el ataque con pocos minutos asegurados en el Real Madrid
El Real Madrid ganó con una solvencia inaudita esta temporada al Galatasaray en la cuarta jornada de la fase de grupos de la Champions League. Hacía mucho tiempo que no se veía al conjunto blanco tan demoledor en ataque y como guinda explotó Rodrygo, el chaval que ilusionaba al Bernabéu en las últimas semanas y que se coronó con una exhibición total.
Tres goles y una asistencia fue su tarjeta de presentación en un encuentro que terminó con 6-0 en el luminoso. Eso sí, hay otras cuestiones del partido que generan un problema serio al Real Madrid. Porque Zidane no parece tener el tacto suficiente con un Luka Jovic que salió del Santiago Bernabéu con un cabreo difícil de calmar.
El partido al descanso iba 4-0. Estaba resuelto y solo había que administrar los cambios. Ni por esas descansó un Benzema que lo juega todo. Jovic estuvo calentando y finalmente no participó. El serbio no quiere perder más opciones y con la Euro en el horizonte quiere buscar una salida para tener minutos y recuperar su nivel.
En este escenario ha irrumpido el nuevo RC Celta de Óscar García, que tiene muchísimo talento pero añora un nueve realmente goleador que libere de responsabilidad a Iago Aspas. Luka Jovic sería el jugador perfecto para ese fin. Zidane no quiere soltarlo, por si se lesiona Benzema. Pero con el poco tacto mostrado será difícil que el serbio entre en razón.
