Llegaría pisando fuerte, imponiendo su estilo y sacando petróleo en una directiva hasta acá renuente a fichar con calidad
No para de sonar el nombre de Antonio Conte como el nuevo entrenador del Real Madrid, o al menos eso es lo que circula con frecuencia, a lo que también se le debe adicionar que lo haría solo si le cumplen con un fichaje. El estratega italiano, que de paso sea dicho acaba de salir campeón en su país con el Inter quiere a Romelu Lukaku en su plantilla, una exigencia además muy conveniente.
Desde hace bastante tiempo que en el club de Chamartín no impera un nueve de área, uno de esos referentes que meten miedo en el arco rival y que suele conquistar 8 de cada 10 pelotas que le llegan. El belga es uno de ellos y hasta ahí se deja claridad, este delantero es la base de su nuevo esquema ofensivo y por el que hay que salir a pagar lo que piden.
Aunque no es barato, si lo ven como un elemento esencial; el pedido de Conte en el Inter es el fichaje del que todos hablan en la capital
Las negociaciones para ser el nuevo entrenador van bastante adelantadas. De hecho, un medio italiano ha soltado que restan solo detalles, pues eliminado de la lista Allegri, éste es el que mejores sensaciones le deja a la directiva liderada por ‘Flo’. Con Lukaku ha mejorado su relación, y lo ha sacado goleador de su equipo pese a la enorme competencia. Ponderando sus virtudes ha explotado sus cualidades y lo ha puesto de nuevo en la élite.
Delantero fuerte, potente y con mucho gol. Lukaku es uno de esos killers a los que los defensas temen, que es complejo moverlos y que sostienen muy bien la pelota. En velocidad es incontrolable y ha ganando mucha experiencia desde que se posicionó en la Serie A. Se habla de un pago por valor de 120 millones, que Florentino deberá empezar a analizar y ejecutar.
Cambio drástico en el concepto y la ejecución
Pero para seguir analizando la llegada de Conte hay que tocar algunos puntos, el que más su manera de ver el deporte. Conte es un amante de los tres centrales, de poblar el medio campo y de jugar con hombres rápidos en el frente. Lukaku le viene perfecto, porque sostiene, pica al espacio y sabe jugar en zonas reducidas.
Lo demás corre por cuenta de la planificación de sus equipos. Al cambiar tan drásticamente de idea hay que preparar a los jugadores, por eso lo imperioso de firmar cuanto antes. El profesional requiere de un tiempo de adaptación, y en eso están pensando ahora mismo. Un campeón para un equipo acostumbrado a serlo, de paso un capricho que suple el sueño de un estratega con un estatus enorme en el mundo. Veremos cómo se desarrolla todo.