El Real Madrid no pudo pasar del empate ante el RCD Mallorca y las miradas se centran en Mbappé y Vinicius, las dos grandes estrellas del equipo que tuvieron un partido gris
El triunfo en la Supercopa de Europa eclipsó lo que fue un muy mal partido del Real Madrid, que vuelve a ser una constelación de estrellas. Pero como quedó demostrado durante el primer mandato de Florentino Pérez, las estrellas no hacen un equipo. Algo que quedó demostrado ante el RCD Mallorca en el primer partido de liga, pues ni Mbappé ni Vinicius Jr tuvieron un buen desempeño.
Las dos grandes estrellas del equipo mostraron signos de incompatibilidad, pues ambos son jugadores que tienden a ocupar la banda izquierda del ataque. Algo a lo que también hay que sumar el factor Rodrygo, quien no es un extremo diestro pese a que es la posición que queda por ocupar en el ataque blanco. Y Ancelotti ha comenzado a darse cuenta.
Ancelotti comienza a preocuparse por los problemas entre Vinicius y Mbappé
Pese a que existe muy buena relación entre Vinicius y Mbappé, la realidad es que sobre el terreno de juego la situación es muy diferente. El francés ejerce de nueve en el equipo blanco, mientras que la banda es para el brasileño. Pero la realidad es que, de este modo, ni uno ni otro rinde a su mejor nivel. Algo que es un quebradero de cabeza para Ancelotti.
Asimismo, cabe destacar que, con el 4-3-3 empleado en los dos primeros partidos de la temporada, el Real Madrid ha mostrado graves problemas de equilibrio. Ni Tchouameni, ni Valverde ni Bellingham son capaces de controlar los tiempos del partido, pues son jugadores con otras características. Algo a lo que Ancelotti podría poner solución modificando nuevamente el esquema.
Volver al rombo, la solución más sensata
En el día de ayer, el Real Madrid pudo caer derrotado perfectamente ante el RCD Mallorca, que cuajó un muy buen partido. Ancelotti ya ha admitido que el equipo tiene problemas de equilibrio, algo que solo podría aportarle una modificación en el sistema. De este modo, la solución más sensata pasa por cambiar el 4-3-3 por el 4-3-1-2 de la pasada temporada.
Así pues, el ataque quedaría conformado por Vinicius y Mbappé, siendo Bellingham el mediapunta. Rodrygo se quedaría fuera del once para dar entrada a Modric, el único jugador de la plantilla capaz de poner orden en el conjunto blanco. Otra opción sería retrasar al inglés, colocando a Arda Güler a la mediapunta. Pero los problemas de control de juego y equilibrio podrían no tener solución con una alineación tan ofensiva.
