Tres goles, tres puntos y balón a casa, el domingo del hijo bético que ha acabado desatando la alegría en el Benito Villamarín
Juanmi no solo ha detonado el estadio en Sevilla, sino que ha cuajado un desprendimiento impensado; una salida en el Betis como consecuencia. El autor del triplete, del triunfo y de la ilusión renovada de sus fans ha salido al campo a derrotar al que siempre ha sido su presa más simple, el Levante. Una presentación maravillosa, para colgarla en la historia y para mantener la fe en donde al parecer se estaba agotando.
El partido ante Levante resultó ser una prueba mucho más dura de lo que se creía, ante un rival que venía herido pero que sabía que tenía en juego mucho más que el simple margen de puntos. Por eso se fueron ganando al vestuario, hasta que apareció la figura de Juanmi, figura que a la postre ha salido coreado por los miles de espectadores que asistiendo al santuario de los verdiblancos.
Su actuación ha sido una muestra de lo que se veía venir, Juanmi se queda en Betis y los que parecían fijos ahora buscan sitio
La referencia es para Borja Iglesias, el panda que se le vio contento saludando a su compañero cuando dejó el terreno de juego. Sin minutos y con la figura rutilante de Willian José parece poco probable que se pueda extender en su estadía. Tiene uno de los mejores promedios anotadores de todo España, y no solo eso sino de todo Europa que en este instante no le valen para nada.
Así que es incuestionable, el entrenador pone lo mejor que tiene en el campo y le está saliendo. Borja Iglesias parece perder cada día más el peso en el ataque, y con ello se abre una carpeta extensa de opciones que son muy importantes. Lo mejor de todo es que por sus cifras tiene cartel y al tener cartel tiene chances concretas de ir a parar a otro sitio.
De comienzo a fin, Juanmi destruyendo en todos los sectores del campo
Cuando la noche se veía caer encima de los dirigidos por Manuel Pellegrini ha aparecido el extremo para tomar una asistencia a borde de área por parte de Willian José para definir al palo más lejano del portero rival y empatar el partido. Minutos más adelante se ubicó en la zona de candela y tras un saque de esquina aprovechó para capturar un rebote corto y dar la vuelta al marcador.
La frutilla del postre la ha puesto tras una fenomenal jugada de Nabilñ Fekir para definir cruzado y acabar con el suspenso. En el desarrollo del partido se vio activo, punzante, generoso cuando tenía que repartir y veloz. Especialmente funcional en el uno contra uno, y determinante cuando tuvo que tomar decisiones. El resto es historia.
