El técnico no cuenta con el apoyo de algunos futbolistas del equipo
La etapa de Rubi en el banquillo del Betis puede terminar mucho más pronto de lo esperado. El técnico catalán no ha cumplido con las expectativas que el club le había puesto esta temporada y por eso ya se barajan varias alternativas como posibles sustitutos. Una destitución que además sería celebrada por algunos jugadores de la plantilla como Lainez o Tello.
Y es que si una cosa ha dejado clara Rubi en esta su primera temporada a las órdenes del Betis es que no cuenta con jugadores como el extremo español o el mexicano. Además ha dejado en un rol residual a otros integrantes de la plantilla como Sidnei y Pedraza, dos futbolistas que empezaron la temporada a gran nivel y que de repente desaparecieron.
De ahí que estos jugadores fueran los grandes favorecidos de un cambio de entrenador en el Betis. Nadie dice que con un nuevo técnico fueran a tener más protagonismo, pero al menos tendrían la oportunidad de empezar de cero como el resto de sus compañeros e intentarse ganar la confianza de este nuevo entrenador, al que de momento no se puede poner nombre.
Marcelino y Pellegrini a la espera
Bastante complejo lo está teniendo por estos días Rubi en el banquillo del Real Betis Balompié. Los complejos resultados y su delicada posición en la tabla de posiciones le tienen con un pie y medio afuera del cargo. Y si bien tiene algunas probabilidades de poder seguir al frente, si es que logra al menos arañar un cupo a Europa, los indicios son claros, todo se debatirá entre Marcelino y Pellegrini.
La gran cúpula directiva ha tomado esta vía de acuerdo a unos sondeos internos que ha logrado establecer en estos días. De este par de entrenadores saldrá la próxima cabeza estratégica del club, y eso es un hecho que viene siendo cantado a los cuatro vientos. El primero en salir a exposición ha sido el ex Valencia, y ese es un hecho al que no se le ha querido restar importancia.
Marcelino no puede entrenar esta temporada gracias al retiro forzoso del cuadro ché, pero como no es un tema de inmediatez, todo indica que para el verano ya tendrían clarificado el tema con la posibilidad abierta que da el mismo. Su salario se ajusta y además podría incluir un argumento mucho mayor que le daría el impulso de ser el ganador de la puja.