El Mallorca sufrió una derrota amarga ante el Alavés en Mendizorroza, donde el equipo dirigido por Jagoba Arrasate no logró encontrar su ritmo en ningún momento
La rueda de prensa posterior al partido entre Mallorca y Alavés dejó ver la decepción de Jagoba Arrasate, quien no escondió su frustración tras un juego donde su equipo se vio superado. Mallorca, que llegaba con opciones de posicionarse en la zona alta de la clasificación, no logró mostrar su mejor versión en Mendizorroza. La derrota ante los de Luis García Plaza, que dominaron tanto en juego como en ocasiones, dejó a Arrasate con un sabor amargo.
El entrenador reconoció que su equipo no logró en ningún momento tener el control, lo cual dificultó cualquier intento de reacción. “Hemos hecho un mal partido, no hemos estado cómodos en ningún momento”, afirmó. El equipo bermellón, que venía de empatar ante el Athletic, no pudo aprovechar el impulso, y pese a los intentos de reacción en la segunda mitad, un gol desafortunado terminó de sentenciar el encuentro en su contra. Jagoba dejó claro que hasta el punto hubiera sido un logro dada la situación en la que se encontraban.
Cambios de última hora y estrategia sin frutos: rotaciones y un cambio inesperado en la banda
Arrasate explicó las decisiones en la alineación y su intención de buscar variantes ofensivas. En esta ocasión, optó por dar descanso a algunos titulares y sorprendió con la inclusión de Chiquinho en la banda izquierda. El navarro compartió que la idea era explotar la velocidad del jugador portugués en esa zona, pero un pinchazo durante el calentamiento forzó el cambio en el último momento, dejando fuera a Valery. “Queríamos amenazar desde esa banda izquierda, pero desafortunadamente no salió como esperábamos”, señaló con cierta resignación.
La entrada de jugadores como Antonio Sánchez, Muriqi y Sergi Darder en la segunda mitad buscaba darle al equipo mayor profundidad y dinamismo. Sin embargo, los cambios no lograron el efecto deseado. La férrea defensa del Alavés y la falta de conexión en los últimos metros hicieron que la esperanza de un empate se desvaneciera poco a poco.
Un partido marcado por las emociones y el impacto del desastre natural en la Comunidad Valenciana
Más allá del resultado, Arrasate y sus jugadores mostraron su sensibilidad hacia la situación que atraviesa la Comunidad Valenciana tras el paso de la DANA. Antes del encuentro, tanto el técnico como varios jugadores, entre ellos Pablo Maffeo y Toni Lato, manifestaron su preocupación por sus familias y amigos afectados. Para el equipo, el contexto emocional no era el mejor, y aunque todos intentaron enfocarse en el juego, las noticias que llegaban les afectaron profundamente.
Lato, visiblemente afectado, expresó su deseo de estar cerca de sus familiares en estos momentos difíciles. “Es complicado no poder estar allí para ayudar, sobre todo cuando ves cómo alguien cercano sufre”, comentó. La cercanía con lo ocurrido dejó en claro que, aunque el fútbol es importante, hay momentos en los que otras cosas pesan más, y en esta ocasión, los pensamientos estaban divididos.