La competencia por el talento del cántabro se hace cada día más compleja, los clubes interesados han apostado fuerte por su él y sus movimientos
Hoy es muy complejo ver jugadores incidentes en campañas muy altas para clubes de bajo presupuesto. La respuesta a ello es básicamente que el nivel inversor corresponde a las expectativas del club mismo y eso repercute en sus colocaciones en la tabla genera de posiciones. Pues bien, también existen ejemplos que rompen el molde, como el de Paulino de la Fuente, que desde su participación en Logroñés ha sido tentado por el Espanyol.
No cabe la menor duda que desde su colocación en el extremo derecho tiene un potencial muy grande. Ha sido el cerebro del último triunfo de su equipo y desde que se ganara la titular al final del año anterior ha dejado muestras de eso. Hoy es el objetivo número 1 del RCD Espanyol, que sin embargo no podrá respirar tranquilo debido a que su competencia se amplía con clubes como el Eibar y el Huesca que están en primera división.
Plantando cara se han ido de frente al RCD Espanyol los rivales que buscan con asedio a Paulino de la Fuente
No son propiamente los rivales más peligrosos, ni los que desde su estructura empresarial puedan ofender, pero están en primera categoría y para alguien de 23 años que recién está explotando y quiere hacerse un nombre es un tema a tener en cuenta. Para ello el Espanyol deberá certificar cuanto antes su ascenso, y establecer un parámetro que le permita surgir ante estos eventos.
Su contrato finaliza el 30 de junio y eso le deja un buen sabor de boca. Puede firmar de manera gratuita con el club que él decida, y que marque sus prioridades inmediatas. La información la ha suministrado una fuente muy corroborada, que trabaja cerca del jugador y que conoce su actualidad. El extremo es uno de los mejores en su posición, acumulando tremendos números esta temporada.
Lo hecho hasta acá ha sido suficiente, Paulino está en su fase final dentro de Logroñés
Un comienzo turbulento no ha significado nada en contra de este gran exponente del juego por la banda. De los 24 partidos disputados esta temporada, 17 los ha jugado como titular, ganando en confianza y demostrando a su entrenador su valía como activo importante. Su registro afirma que son ya 1610 minutos sobre el campo, con un gol y varias asistencias.
De hecho, el último triunfo en campo del Mirandés fue todo obra suya. Una pelota que gana por derecha, se inserta al área eliminando rivales y sirviendo a su compañero para que solo la haya tenido que empujar. Es su ADN, es un jugador de equipo, poco egoísta y un claro ejecutor del ataque al espacio.
