Los gallegos están contrariados ante la baja de su capitán y han decidido enfrentar el tema con soluciones drásticas
En el RC Celta la merma en rendimiento de cualquier jugador es sensible, pero se expone mucho más cuando ese jugador es Iago Aspas. No cabe la menor duda que el moañés es el alma de ese equipo, que orientado por Eduardo Coudet esta temporada no ha sido ni la sombra de lo que fue por ejemplo en la recta final del curso pasado.
Pues bien, insertados en el cuestionamiento del por qué estaba sucediendo esto, han llegado a la conclusión que es la alta carga de partidos que lleva a su espalda. Y es que la rueda de prensa tras la derrota ante Sevilla así lo decía. El entrenador echa en falta los mejores momentos de su capitán, y cree que es el mejor momento de tomar el toro por los cuernos en retaliación a este pálido presente.
Para poder volver a tener el mejor Iago Aspas, el Celta ha organizado una estrategia a corto plazo
La costumbre es verlo los 90 minutos en el terreno de juego, pero luego vienen las cuestionantes, sobre si está en su estado de forma ideal o si la edad le permite jugar tanto y tan seguido. Son 34 años ya los que tiene el capitán y es claro que algún descanso requiera. Al menos en la planificación debería estar como han dicho o manifestado algunos emisarios del club a los distintos medios.
Así que esa parece ser la medida, y tal como sucede con Nolito, darle menos responsabilidades para tener al final lo mejor de su fútbol podría ser una medida justa. De esa manera se aseguran que el jugador responsa a los estímulos, y lo mejor de todo, que esté preparado y en óptimas condiciones en los minutos que esté sobre el terreno de juego.
El Celta y una carrera contra el tiempo para no descender
Ya empieza a preocupar el tema, de hecho esta ha sido una de esas postulaciones que más eco han tenido en el presente. Los resultados no han estado a la par de sus expectativas, y de a poco se va resintiendo todo. El Celta ocupa la casilla número 15 de 20 equipos y con 7 unidades está solo 2 puntos por encima de la delgada línea que marca la zona de candela.
Así que a Codet ya lo han empezado a cuestionar de más, señalando que su manejo ha perdido consistencia. El equipo ha dejado de ser consistente en ataque, y cada vez más se le ve frágil cuando tiene que soportar los embistes del rival. Un tema de amplio recorrido, que entre otras cosas se suma a las exigencias de la afición no solo en el campo, sino en las redes sociales.
