El centrocampista del Celta volvió a hablar sobre su continuidad en Vigo. La temporada está por concluir y la incertidumbre crece.
Fran Beltrán presiona a los directivos del Celta pidiendo la renovación de su contrato. El mediocentro madrileño es uno de los emblemas celestes y con peso en el vestuario. Su contrato vence en junio de 2026 pero él quiere continuar. En tanto, el director deportivo del club Marcos Garcés por ahora, tiene otras prioridades
“No me han dicho nada todavía” fue la frase que soltó Beltrán, que en junio próximo entrará en el último año de su contrato. Su deseo es quedarse en Vigo, pero la cuestión numérica apura al mexicano Garcés. Celta necesita acomodarse en las arcas económicas para poder centrarse en la temporada que viene.
Acortar la plantilla, la clave
La llegada de Garcés a Balaídos tuvo como principal objetivo reducir la masa salarial para poder concentrarse en fichajes, sobre todo, si el Celta logra una plaza europea para la temporada que viene. Mientras planea los refuerzos, el mexicano intenta deshacerse de seis jugadores cedidos, repartidos en varias ligas, y liberar salario.
En cuanto a las llegadas, el entrenador Claudio Giráldez pidió por la continuidad de Moriba (los celestes deberán abonar seis millones para ejecutar la cláusula de compra). La otra posición que preocupa es la del central: si sale el sueco Starfelt, la opción más firme para reemplazarlo es la del griego Ilias Kostis, hoy en el Atlético B.
Marcos Garcés necesita reducir la masa salarial para fichar
Beltrán, un histórico en Balaídos
Beltrán ha demostrado una constancia y compromiso con el Celta que lo llevó a transformarse en un orgullo para la afición celeste. Esta temporada disputó 29 partidos oficiales (26 de ellos en LaLiga) y marcó dos goles, además de su habitual despliegue en el centro del campo y su liderazgo.
A sus 25 años, acumula ya 240 partidos con la camiseta del Celta. Es el quinto jugador con más apariciones en la máxima categoría en la historia del club. Lejos de querer cambiar de aires, Beltrán desea seguir unido a Vigo por muchos años más, pero para eso deberá recibir un guiño de la directiva.
