Thiago Alcántara sonó para continuar el mismo camino trazado por su hermano Rafinha y su padre Mazinho, pero decidió poner fin a su carrera sin jugar en el Celta
Sin duda alguna, uno de los jugadores que más ha marcado al Celta en la última década ha sido Rafinha. El futbolista criado en la cantera del FC Barcelona se convirtió durante su cesión en uno de los ídolos de Balaídos. Pero pese a los intentos del club para conseguir su fichaje en propiedad, nunca se llegó a un acuerdo.
Ahora, diez años después de su marcha de su primera etapa, Rafinha se encuentra sin equipo. Es por eso que muchos aficionados celestes han pedido durante los últimos meses su regreso. Sin embargo, este regreso parece ser más un sueño que una realidad. Y es que Claudio Giráldez tiene otros planes para el proyecto deportivo del Celta.
Rafinha no encaja con el proyecto de Claudio Giráldez en el Celta
Durante los dos últimos años, Rafinha ha militado en Al Arabi catarí, quedando alejado de los focos. Ahora, su nivel es una incógnita, por lo que el interés en su fichaje ha disminuido considerablemente. Pero no solo eso, sino que, como ha quedado demostrado, Claudio Giráldez está construyendo un proyecto joven en el conjunto celeste.
Desde su ascenso al primer equipo, Claudio Giráldez ha confiado ciegamente en los jugadores de la casa. Es por eso que Rafinha, a sus 31 años, podría no encajar con los tiempos del conjunto celeste. Especialmente teniendo en cuenta la gran competencia que existe en el centro del campo del Celta, que cuenta con jugadores de enorme calidad.
El centro del campo celeste está bien cubierto
Mientras que en determinadas posiciones el Celta podría necesitar un refuerzo, el centro del campo no es una de ellas. Actualmente, Claudio Giráldez cuenta con jugadores como Jailson, Damián Rodríguez, Fran Beltrán, Ilaix Moriba, Luca de la Torre o Hugo Sotelo. Jugadores que pelean por dos puestos en el once.
Debido a esta situación, el regreso de Rafinha al Celta parece completamente descartado. En el fútbol no se puede dar nada por garantizado, pero todo parece indicar que el internacional brasileño no volverá a jugar con la camiseta celeste. Algo que es una desilusión para algunos aficionados, pero que es una sensata decisión para que el club tenga el mejor futuro posible.