El Sevilla venció al Rayo Vallecano en un partido intenso, marcado por la expulsión de Unai López y decisiones arbitrales que influyeron en el resultado
El Rayo Vallecano cae ante el Sevilla tras un juego marcado por expulsiones y desaciertos. James Rodríguez regresó de la doble fecha FIFA buscando minutos, pero no fue incluido por Iñigo Pérez, lo que generó preguntas en la previa. Sin el colombiano, el equipo madrileño intentó proponer un juego ofensivo, aunque las decisiones arbitrales marcaron el rumbo del partido.
En los primeros minutos, el Sevilla supo presionar y complicar la salida del Rayo. Al minuto 27, Sow adelantó al conjunto local con un remate preciso tras una jugada colectiva en la frontal del área. El golpe para los de Iñigo Pérez llegó justo antes del descanso, cuando Unai López fue expulsado por una agresión sin balón, validada por el VAR. Con diez jugadores y un marcador adverso, el equipo visitante quedó sin margen de reacción en la segunda mitad.
Planteamiento táctico y decisiones que dejaron al Rayo expuesto
El Sevilla, aprovechando la superioridad numérica, consolidó su dominio en el mediocampo. Batalla, en portería, intentó contener los ataques sevillistas, pero la zaga del Rayo, liderada por Catena, no logró evitar la presión constante. La ausencia de James Rodríguez se notó especialmente en el medio campo, donde el equipo echó en falta su visión de juego. En ataque, Raúl de Tomás quedó aislado, incapaz de generar peligro.
El técnico del Rayo no esquivó las preguntas en rueda de prensa. “Era complejo”, afirmó Pérez, refiriéndose a jugar con un hombre menos desde el final del primer tiempo. Reconoció que, aunque en otras ocasiones han superado escenarios similares, el Sevilla fue implacable. “Jugar fuera de casa con esa intensidad y sabiendo que cualquier error te penaliza, era un desafío enorme”, agregó.
Sobre la expulsión de Unai López, Pérez se mostró cauto. “No vi bien la acción, pero cuando el árbitro revisa en el VAR, sabes lo que va a suceder”, dijo, dejando entrever su resignación. También destacó el esfuerzo de sus jugadores, a quienes calificó de “tremendamente honrados y limpios”, aunque lamentó los pequeños errores que costaron el partido.
Entre la disciplina y las lesiones: el Rayo busca respuestas
El entrenador también habló sobre la carga emocional que supone perder con decisiones arbitrales cuestionables. “No sé si fue justa la roja, pero nos condicionó completamente”, comentó. Además, Pérez hizo hincapié en la necesidad de mantener la disciplina en el campo para evitar situaciones similares en el futuro.
Sin duda, con esta derrota, el Rayo encadena su segunda caída consecutiva, mientras el Sevilla respira aliviado al romper su mala racha. Ambos equipos buscarán redimirse en los próximos compromisos.
