Durante la rueda de prensa posterior al partido, criticó duramente una jugada polémica que, según él, pudo haber cambiado el desenlace: “Lo de Catena me parece un penalti como una catedral de grande”, declaró con firmeza
Vicente Moreno salió visiblemente molesto de la rueda de prensa tras el empate 1-1 entre Osasuna y Rayo Vallecano en El Sadar. Aunque reconoció el esfuerzo de su equipo, dejó claro que siente frustración por decisiones arbitrales que, según él, no están favoreciendo a Osasuna en momentos clave. “Lo de Catena me parece un penalti como una catedral de grande”, afirmó con contundencia, haciendo referencia a una jugada en el primer tiempo que pudo cambiar el rumbo del partido.
El técnico explicó que su equipo llegó con la intención de sumar los tres puntos, pero no pudo superar un gol tempranero del Rayo. A pesar de dominar en la segunda mitad y conseguir el empate, Moreno cree que merecieron más. “Con el empuje de la segunda parte he tenido la sensación de merecer algo más”. No obstante, el sabor del punto conseguido fue “agridulce” para un Osasuna que buscaba redimirse tras varias jornadas sin ganar.
Decisiones arbitrales y el impacto psicológico en Osasuna
La jugada sobre Catena fue el centro de su indignación. Moreno aseguró haber revisado la acción después del partido y no dudó en calificarla como determinante. “No estamos teniendo suerte con estas acciones”, comentó, recordando otros episodios similares en encuentros recientes frente al Atlético de Madrid y el Villarreal. Estas decisiones, según él, están minando la moral del equipo, que ya siente el peso acumulado de los errores arbitrales.
Sin embargo, no solo los árbitros fueron objeto de sus críticas. Moreno también señaló que la carga de partidos está afectando a Osasuna más que a otros equipos. “Somos el equipo más perjudicado en ese sentido”, expresó, aludiendo al exigente calendario que los obligó a jugar tres encuentros en una semana, con apenas tiempo para recuperar energías.
La intensidad del Rayo y el desgaste acumulado
El técnico destacó la intensidad del Rayo Vallecano como un factor que incomodó a su equipo, especialmente en el primer tiempo. “El Rayo tiene un alto grado de intensidad y no hemos estado cómodos”, admitió. A pesar de esto, Moreno defendió su decisión de repetir alineación, argumentando que el desgaste no debería haber sido una excusa para no competir mejor.
Aunque el empate deja a Osasuna en una posición incómoda en la tabla, el entrenador confía en que el equipo pueda superar este bache. Cerró su intervención asegurando que, pese a todo, el grupo sigue trabajando con la misma intensidad para recuperar el rumbo. La presión, sin embargo, parece estar pasando factura, tanto física como mentalmente, en un equipo que sigue buscando justicia dentro y fuera del campo.