El Mirandés no logró consolidar una victoria en su enfrentamiento ante el Cádiz, un duelo en el que los rojillos vieron cómo los visitantes neutralizaban sus ventajas en dos ocasiones
El Mirandés se quedó a las puertas de una victoria que habría sido vital para recuperarse de la reciente derrota frente al Tenerife. En un encuentro vibrante contra el Cádiz, los de Alessio Lisci vieron cómo los visitantes igualaban en dos ocasiones los goles anotados por Gorrotxa, frustrando así los esfuerzos rojillos de sumar tres puntos. Sin embargo, Lisci, en su habitual estilo directo y analítico, dejó clara su satisfacción por el rendimiento de sus jugadores. Afirmó que el equipo había hecho méritos suficientes para llevarse la victoria, destacando la calidad y la respuesta del grupo en un partido exigente.
“Si analizamos bien el partido, hemos merecido ganar. Tuvimos ocasiones claras que podrían haber sentenciado, aunque es cierto que ellos también tuvieron una oportunidad que pudo haberles dado la victoria”, comentó Lisci. El técnico subrayó que le gustó cómo su equipo reaccionó ante los momentos críticos, y consideró que jugaron un partido de gran nivel. “Han hecho un partidazo y hemos merecido más. Hay días en los que te mereces más y no ganas; hoy ha sido uno de esos”, añadió con serenidad, dejando entrever la confianza en la evolución de su equipo.
La reacción del equipo en los momentos decisivos
Al hablar sobre las oportunidades de alejarse en el marcador, Lisci reconoció que lo intentaron tras cada gol, pero las circunstancias no permitieron ampliar la ventaja. “Después del primer y segundo gol, buscamos aumentar la diferencia, pero no se pudo. Es un día de oportunidades perdidas porque lo tuvimos ahí, al alcance”, expresó con cierto pesar. El empate supone un balance de solo un punto en los últimos dos partidos, una situación que el técnico considera que no refleja la buena dinámica de trabajo del equipo.
“Hacer un solo punto en los dos últimos encuentros es triste, pero seguimos en un momento muy positivo de trabajo. Confío en que los resultados volverán porque el esfuerzo y la dedicación están ahí”, añadió Lisci, transmitiendo optimismo y fe en su plantilla. Además, el análisis de Lisci no dejó de lado los aspectos críticos. Reconoció que el primer gol del Cádiz llegó en un momento delicado, al final de la primera parte, y atribuyó el tanto a un error en la presión que no supieron gestionar. El segundo gol, según el técnico, llegó cuando el Mirandés estaba más cerca del tercero que del empate.
La evolución de Gorrotxa: un punto brillante
El técnico también destacó la calidad de Ontiveros, autor de los goles visitantes, y reconoció que pocos jugadores en la categoría tienen su capacidad técnica. “Los dos goles de Ontiveros los marcan pocos jugadores en Segunda y Primera. Es un jugador que está dos categorías por encima en cuanto a talento”, elogió Lisci, valorando la dificultad de frenar a un rival de esa calidad.
El entrenador también habló sobre la evolución de Gorrotxa, resaltando su capacidad para mejorar y adaptarse a las exigencias tácticas. “Es un jugador inteligente, que sabe lo que necesita mejorar y trabaja en ello. Su llegada en transición es clave y ha demostrado estar donde se le necesita”, afirmó Lisci, destacando la inteligencia y la ambición del jugador como elementos esenciales para su crecimiento.