El CD Mirandés afronta el tramo final de LaLiga Hypermotion con la ilusión de alcanzar el ascenso a Primera División. Con solo unas jornadas por disputarse, el equipo de Alessio Lisci depende de sí mismo para lograr el objetivo
El CD Mirandés está cada vez más cerca de hacer historia. Con la recta final de LaLiga Hypermotion en marcha, el equipo dirigido por Alessio Lisci mantiene su posición en la cima de la clasificación y avanza con paso firme hacia el objetivo. A falta de doce jornadas, la afición rojilla se ilusiona con la posibilidad de ver a su equipo en la máxima categoría del fútbol español.
De los duelos restantes, cinco se disputarán en Anduva, un escenario donde el Mirandés ha demostrado ser prácticamente imbatible. Sin embargo, la mayor parte de los encuentros serán como visitante, un factor que representa un desafío adicional para el conjunto burgalés. Aun así, el rendimiento del equipo y su solidez defensiva lo colocan como uno de los candidatos más fuertes en la lucha por el ascenso.
Un equipo que desafía las expectativas
Con 54 puntos en su casillero, la permanencia ya no es un motivo de preocupación para el Mirandés. El equipo ha dejado atrás su objetivo inicial y ahora se centra en consolidar su posición en la parte alta de la tabla. La reciente victoria sobre el Real Oviedo permitió a los rojillos afianzar su liderato y aprovechar los tropiezos de sus rivales directos. “Este partido marcará nuestro futuro”, afirmó Lisci antes del duelo contra el conjunto carbayón.
Su declaración reflejaba la importancia del enfrentamiento, y sus jugadores respondieron con una actuación contundente, sumando su decimosexto triunfo de la temporada. Más allá de los resultados, el Mirandés ha mostrado una madurez que sorprende, especialmente considerando que su plantilla es la más joven de la categoría. El equipo destaca no solo por su rendimiento ofensivo, sino también por su solidez defensiva. Es el conjunto que menos goles ha encajado en LaLiga Hypermotion, una estadística que respalda su ambición de ascenso.
Una recta final llena de retos
Ahora, el desenlace del campeonato pondrá a prueba la fortaleza del Mirandés. En su calendario aparecen enfrentamientos ante equipos que luchan por la permanencia, como Burgos y Castellón en casa, así como Sporting y Eibar fuera de Miranda. En las dos últimas jornadas, los rojillos afrontarán duelos con rivales de distintos objetivos, recibirán al Almería, un equipo de gran potencial que todavía busca asegurar su puesto en el playoff, y cerrarán la liga regular visitando al Cartagena, actual colista de la competición.
A falta de doce partidos, el sueño del ascenso sigue intacto. El Mirandés ha demostrado que tiene argumentos para pelear hasta el final y que su fortaleza como equipo lo convierte en un serio aspirante. Ahora, la clave estará en mantener la regularidad y aprovechar cada oportunidad para seguir escalando.
