Condiciones de locura, el precio que se debe pagar por tener al mejor jugador del mundo
Estamos a nada de presenciar una nueva situación bisagra en el FC Barcelona. Sus elecciones presidenciales tienen el único fin de mostrar un cambio concreto, que deje de lado lo hecho hasta acá por Bartomeu, con todo y la pésima gestión que en números y resultados deportivos ha dejado hasta ahora.
Pero yendo más allá de eso, y lo que tenga derivado dicha acción, habrá que analizar las palabras del capitán, líder e insignia del club, el argentino Leo Messi. Él desde su comodidad, la que se ha ganado por todos estos años ha emitido que estará presente en el club y su proyecto solo si antes le proporcionan algo, una exigencia en respuesta a lo que ha sido el trato y la salida de su amigo Luis Suárez.
Solo si se cumple él mantiene su postura, de lo contrario pone marcha a otro club
Como garantía, el astro rosarino ha dicho que desea un aumento salarial, que ya había sido argumentado en su última renovación, por allá en el año 2017. Para eso ha hecho un llamado a Laporta, el que se cree vaya a ser el nuevo presidente, y que tiene entre sus principales acciones el hecho de sostener a Messi en la plantilla.
De los 35 millones de euros que devenga en la actualidad, quiere se le suba a 50 su sueldo. A esto habría que sumarle muchas cosas como las variables en cuestión de consecución de objetivos, primas ordinarias y muchos elementos más. Sumado todo, estaría por el orden de los 100 millones por temporada, una barbaridad a la que no se sabe aún si vayan a acceder.
Laporta tiene que tomar duras decisiones por el bienestar del club
Desde luego que esto ha desatado una serie de acciones de su lado que aún no son muy claras propiamente. Pagar esa cantidad se lleva la mitad de las obligaciones conceptuales del Barça en un momento donde la economía no apremia a nadie. Además, las elecciones todavía no se llevan a cabo, y sería muy complejo determinar un triunfo hipotético en esta revolución que vive la institución catalana.
Pero la amenaza es muy clara, si no acceden él tiene todo arreglado con el Manchester City de Pep Guardiola, además de irse sin valor alguno, ya que sui vínculo termina al final de la temporada. Una situación que no deja dormir a nadie dentro del club, y que tiene moviendo todas las fibras a cuenta de lo que ellos consideran el movimiento obligado por excelencia.
