El técnico destacó la importancia de sumar puntos en casa, la entrega y el compromiso de sus jugadores, y se tomó el tiempo para explicar decisiones tácticas que fueron claves en el partido
Borja Jiménez, entrenador del CD Leganés, se mostró satisfecho en la rueda de prensa tras la ajustada victoria contra el Sevilla FC en la jornada 13 de LaLiga. En un partido disputado en el Estadio Municipal de Butarque, los locales lograron sumar tres puntos cruciales, consolidando su posición con 14 puntos en la clasificación. Jiménez destacó la competitividad del encuentro y la relevancia de volver a ganar en casa. “Ha sido un partido muy igualado, especialmente en la primera parte, donde las ocasiones de Miguel y Darko fueron claras. En la segunda parte, nos costó más ese penúltimo pase que nos aclarara la jugada del gol”, comentó.
El técnico resaltó el esfuerzo colectivo del equipo, señalando que la clave del triunfo radicó en la fe y el trabajo incansable de los jugadores. “Tenemos un equipo que se deja el alma en cada partido y eso es algo que no se debe pasar por alto. La gente en Butarque nos apoyó y eso también suma”, añadió. Jiménez subrayó la importancia de mantener este nivel de compromiso, especialmente en una liga tan exigente.
Elogios a Jesús Navas y explicaciones sobre los cambios tácticos
Durante la rueda de prensa, Jiménez dedicó palabras de reconocimiento a Jesús Navas, una de las figuras más queridas del fútbol español. “Es un ejemplo de profesionalidad. Ha dado todo por el Sevilla y es merecida cada ovación que recibe. Los aficionados lo saben, y se ha ganado ese respeto con creces”, expresó el entrenador, destacando el impacto positivo de jugadores como Navas en el fútbol.
En cuanto a sus decisiones tácticas, el cambio de Juan Cruz por Óscar en lugar de Cissé fue uno de los puntos que generó preguntas. Jiménez explicó que se basó en la necesidad de aprovechar el rendimiento y las características específicas de los jugadores. “Cissé estaba haciendo un buen partido y presionaba bien, pero interpretamos que el partido pedía jugadores como Óscar y Munir para jugar entre líneas”, afirmó. Además, justificó su decisión mencionando las molestias recientes de Juan Cruz, quien entrenó con un vendaje en el isquiotibial.
Preocupación por las lesiones y el reflejo sobre la carga física
Jiménez no ocultó su inquietud respecto a las lesiones que han azotado al equipo, mencionando el caso de Franquesa. “Hablé con él al final del partido y, aunque intentó seguir, notaba la rodilla inestable. Debemos esperar a las pruebas, pero no tiene buenas sensaciones”, confesó. Este tipo de problemas físicos se ha vuelto una constante en LaLiga, y Jiménez llamó a una reflexión profunda sobre la gestión de la carga de trabajo y el bienestar de los jugadores.
El entrenador se enfatizó que no se trata de un problema aislado del Leganés, sino de algo que afecta a varios equipos. “No es normal lo que está pasando. El Sevilla llegó con seis bajas y nosotros con tres. Algo no estamos haciendo bien y es preocupante, porque se juega con la integridad física de los futbolistas”, sentenció. Sus palabras resonaron como un llamado a la acción para los clubes y la organización de la liga.
Jiménez puso en valor la capacidad del equipo para trabajar en conjunto y subrayó la importancia de mantener la agresividad y la intensidad. “Sabemos que nuestro camino es vivir de este tipo de acciones y que cada jugador sume en cada partido”, concluyó. Sus palabras reflejan un compromiso claro con la identidad de juego del Leganés y la ambición de seguir sumando puntos en una temporada competitiva.