El conjunto gallego ya busca un recambio para el centrocampista eslovaco
Era un secreto a voces y esta semana ha terminado por confirmarse la salida de Lobotka del RC Celta. El centrocampista eslovaco jugará lo que resta de temporada y varios años más en el Nápoles después de que el conjunto italiano haya cerrado su traspaso a cambio de unos 25 millones de euros, cifra exigida por los gallegos. Ahora llegará un sustituto desde las amistades de Messi.
La operación llevaba varias semanas en marcha y eso ha permitido al Celta ir rastreando el mercado en busca de un sustituto. Saben que hay pocos jugadores en el mercado con las condiciones de Lobotka y por eso se centrarán en incorporar un futbolista que pueda tener ese rol de pivote defensivo aunque no tenga tanto toque de balón como el eslovaco.
Así, un nombre que ya está sobre la mesa del cuadro celeste es el de Lucas Biglia. El mediocentro argentino ha sido uno de los grandes referentes de la albiceleste en los últimos años, aunque ahora ya ha perdido protagonismo tanto en su club como en la selección. Sin apenas minutos en el Milan su llegada a Vigo es factible, para alegría de un Leo Messi que es una de sus grandes amistades.
La llegada de Murillo
El RC Celta ha reaccionado a la grave lesión de Nestor Araujo y ha llegado a un acuerdo de cesión para lo que resta de temporada con la Sampdoria por Jeison Murillo. El central colombiano será el nuevo acompañante de Aidoo en la línea de centrales y deja muy tocado al Valencia CF con la situación de uno de sus cedidos.
Y es que el conjunto che estaba seguro que el sustituto de Araujo iba a ser Jorge, que está cedido en Balaídos por el cuadro valenciano hasta verano de 2021. Sin embargo nada más lejos de la realidad y el joven central no está entrando en los planes de Óscar García ni siquiera cuando faltan efectivos defensivos en el equipo.
Tanto es así que desde el Valencia CF se están planteando muy seriamente la opción de poner fin a la cesión, que como decimos está firmada hasta 2021. El conjunto che no va a aguantar que su futbolista pase otro año sin jugar y por eso está dispuesto a revocar el acuerdo, en una operación que recuerda a la de Lunin con el Valladolid y el Real Madrid.