El fichaje uruguayo objetivo del conjunto colchonero se complica
El Atlético de Madrid ha decidido pasar a la ofensiva después de ver las escasas facilidades que otorga el PSG en la operación Cavani. Simeone en persona ha tomado el mando de las negociaciones y las consecuencias podrían precipitarse en las próximas horas. De momento Cavani en rebeldía se niega a jugar más. Y el PSG le ha puesto precio. Pero el último escollo está en el corazón atlético.
Porque si hay algo claro en el Atlético de Madrid es que, ahora que el equipo se ha entonado en el apartado competitivo, es indispensable aumentar la eficacia de cara a gol. Para pelear en Europa hace falta un delantero de primer nivel y con la lesión de Diego Costa urge tener un complemento a Morata.
Cavani es el que más ha gustado desde el principio, sin embargo, la tenacidad de un PSG que no pone ninguna facilidad al traspaso del uruguayo han obligado al Atlético a buscar otras opciones. En ese contexto, había aparecido el Arsenal de Arteta dispuesto a tirar la casa por la ventana para fichar a Thomas Lemar.
Porque en el Arsenal hay otro jugador de los que siempre han gustado al Cholo Simeone. Hablamos de Alexandre Lacazette, cuyo precio ronda los 60 millones de euros. La idea del Atlético era plantear un trueque espectacular que haga que ambos franceses cambien de equipo en el presente mercado invernal. Además Lacazette puede adaptarse a una banda, lo que aumenta las opciones de Simeone.
Esta situación ha elevado la tensión en París. Porque Cavani se muere por jugar a las órdenes de Simeone. De ahí que primero Cavani se ha puesto en rebeldía y a continuación el PSG le ha puesto precio. Cavani será del Atlético si pagan 20 millones antes del 31 de enero. Pero hay lío con un Correa que es uno de los protegidos de Simeone. El argentino le ha dicho al técnico que si viene Cavani él se irá.
Fabinho es una opción real
El sorteo de los octavos de final de la Champions League ha deparado un choque de altos vuelos para el Atlético de Madrid. Nada menos que el Liverpool de Jürgen Klopp, lo que supone un reto incalculable para Simeone. Sin embargo, todo ha empezado a calentarse con un fichaje que se plantea el equipo español en la plantilla de los Reds.
Porque el Atlético ha empezado bastante gris la temporada, mientras que el Liverpool va como un tiro a por el título de la Premier League. A día de hoy, los ingleses son claros favoritos para superar una eliminatoria cuyo partido de vuelta, además, se disputará en Anfield. Pero que nadie de por muerto a un equipo de Simeone.
Porque es la eliminatoria ideal para que el Atlético ponga en liza el estilo más primitivo de su entrenador. Jugar a que no pase mucho, a cerrar los espacios, a esperar a la contra, a no conceder oportunidades para que el Liverpool corra. Y para ello, Simeone busca un refuerzo que puede venir, precisamente del Liverpool.
Un Fabinho que no entra mucho en los planes de Klopp, pero que siempre ha sido muy del gusto de Simeone. Ya se intentó el pasado verano y ahora en enero volverán a la carga por el centrocampista brasileño. Daría un empaque distinto a la sala de máquinas de un Atlético que con Marcos Llorente no ha estado afortunado.
