El conjunto che ve necesario reforzar su centro del campo
Este tramo de la temporada está dejando claro en el Valencia CF que no existe en la plantilla un jugador capaz de dar descanso a Parejo. El capitán lo está jugando absolutamente todo y se le nota fatigado en ciertos momentos de los partidos. Por eso se fichará y en este caso la preocupación debe llegar hasta el Valladolid.
Porque la idea del club valenciano es incorporar un jugador de toque que pueda acompañar a Coquelin o Kondogbia cuando Parejo no esté. Los dos franceses rinden a gran nivel con el español a su lado, sin embargo cuando tienen que actuar juntos es visible que falta calidad, ya que ambos son centrocampistas más destructores que creadores.
Así, un jugador que gusta y mucho en Mestalla es Rubén Alcaraz. Su temporada en el Valladolid no está siendo de tanto rendimiento como el pasado curso, pero aun así desde el Valencia CF consideran que viendo su cláusula de rescisión que ronda los 12 millones de euros es una opción asequible y que puede ayudarles mucho en el segundo tramo de la temporada.
La renovación de Garay
Se ha hablado mucho en las últimas semanas de la posibilidad de que Garay no siguiera en el Valencia CF una vez finalizara su contrato el próximo verano. Finalmente no va a ser así y el central argentino ha aceptado la propuesta que le ha hecho llegar el conjunto che, por lo que muy pronto estampará su firma en un nuevo acuerdo.
De esta forma el Valencia CF tiene pareja de centrales con Garay y Gabriel para rato. Sin embargo esto a su vez puede tener otras consecuencias. Hablamos de Diakhaby y Mangala. Ambos saben que son el tercer y el cuarto central de la plantilla, pero confiaban en que Garay no siguiera en el equipo el próximo curso para poder subir un puesto en la rotación.
Por eso ninguno de los dos descarta ya su salida del Valencia CF una vez finalice la temporada. Sobre todo preocupa el caso de Diakhaby, por el que el club ya rechazó 40 millones de euros de la Premier el pasado verano. Entonces se quedó porque le prometieron más minutos, pero la realidad es que con Garay y Gabriel lo tiene muy complicado.