Huesca y Málaga se citan en El Alcoraz con necesidades diferentes y realidades opuestas. Los oscenses quieren afianzarse en la zona noble, mientras los andaluces buscan oxígeno en la tabla
El Alcoraz recibe un duelo entre dos realidades opuestas. Huesca, asentado en mitad de tabla con 54 puntos y en sexta posición, quiere cerrar abril con nota. Enfrente, un Málaga que coquetea con los puestos bajos, decimosexto con 42 puntos y demasiadas dudas fuera de casa. Ambos llegan con registros equilibrados en cuanto a derrotas diez cada uno, pero la diferencia está en los empates, los andaluces han igualado quince veces, lo que frena sus aspiraciones.
En cuanto a estilo, el equipo de Antonio Hidalgo apuesta por un fútbol más vertical, respaldado por una defensa firme que solo ha encajado 33 goles. Por su parte, los de Sergio Pellicer han marcado menos (34) y recibido más (37), lo que evidencia ciertas grietas en la retaguardia.
Huesca mantiene su dibujo de tres centrales mientras el Málaga opta por doble punta
El último once oscense dejó claro el plan, Dani Jiménez bajo palos, escoltado por tres centrales Loureiro, Jorge Pulido y Rubén Pulido. Los carriles son para Jordi Martín e Iñaki Vilarrasa, y el motor lo ponen Javi Pérez y Óscar Sielva, con Soko y Joaquín Muñoz de lanzadores. Kortajarena parte como enlace, en un 3-6-1 que busca superioridad en medio campo.
Málaga, en cambio, se plantó con un 4-4-2 clásico. Alfonso Herrero bajo palos lideró una línea de cuatro formada por Carlos Puga, Álex Pastor, Galilea y Dani Sánchez. En el centro, Manu Molina y Luismi Sánchez llevaron el peso, con Kevin Medina y Larrubia por fuera. Arriba, Julen Lobete y Chupete ofrecieron movilidad, aunque sin mucha pólvora en la última jornada.
Las bajas condicionan y la disciplina también pesará en el resultado
El apartado disciplinario deja una batalla pareja, 81 amarillas para Huesca y 79 para Málaga, además de 5 y 4 rojas, respectivamente. El juego físico se nota también en las faltas, los visitantes han cometido 472 y recibido 498, una cifra alta que podría ser clave en el desarrollo del partido.
En cuanto a las ausencias, ambos técnicos tienen trabajo extra. Huesca pierde por roja directa a Óscar Sielva y tiene en duda a Javi Mier y Javi Hernández por molestias. Málaga lo tiene peor, acumulación de tarjetas para Dani Sánchez y Kevin Medina, lesión muscular de Luismi Sánchez, y bajas confirmadas como Haitam o Dani Lorenzo. Ramón, además, apunta a volver a finales de mes, pero no llegará. El contexto invita a pensar en un encuentro tenso, donde el equilibrio puede romperse en detalles, balón parado o errores puntuales. Huesca quiere mantener la inercia y Málaga, por fin, dar un golpe de autoridad.
