Pese a que el delantero melillense se ha declarado un seguidor Granadinista, le quiere asestar un golpe financiero bastante grande al equipo nazarí
Este fin de semana el Alavés cayó contra el Granada CF y Samu Omorodion poco o nada pudo hacer en un partido bastante caldeado. El compromiso se llevó a cabo en Los Cármenes, escenario de los nazaríes, donde su afición ya le preparaba una bienvenida poco amistosa a su exdelantero. Las razones giran e torno a varios factores.
El primero de ellos fue dejar al Granada CF para irse al Atlético, cuando la afición y su cuerpo técnico le pidió quedarse. Esta acción golpeó bastante el orgullo Granadinista, al punto que al jugador de 19 años están a punto de declararlo persona no grata allí. Sin embargo, con lo que va a hacer en estos días, quedará como un enemigo público en el club nazarí.
La demanda que prepara Samu Omorodion al Granada
Avalado por sus abogados y por el departamento jurídico del Atlético, el atacante melillense demandará al club nazarí. La razón de esta reclamación jurídica es por la existencia de una “cláusula abusiva” en el contrato del jugador cuando este aún pertenecía al conjunto andaluz. Acto seguido, fue el cuadro colchonero quien terminó pagándola.
Según los abogados de Omorodion, el Granada no tenía derecho de colocar una cláusula de rescisión por 6 millones de euros, pues el salario del jugador era lo bastante bajo para cotejar esa cifra. Si la justicia encuentra al cuadro nazarí culpable, tendrá que devolver el dinero a la escuadra madrileña, pero el ariete no regresará a Los Cármenes.
Samu Omorodion no la pasó nada bien en el Granada – Alavés
Las arengas, cánticos y palabras (en su mayoría insultos) hacia el chico de 19 años influyeron bastante en el partido del fin de semana pasado. El de Melilla se fue en ceros y pocas veces pudo llegar a la portería rival. Su entrenador Luis García lo pudo notar y no le quedó más remedio que sacarlo del partido al 64, justo cuando iban perdiendo 2-0.
Esto dijo el entrenador del Alavés acerca de Samu Omorodion. “No sé lo que ha salido (en la prensa). Es un partido emocional para él. Me afectó a mí cuando fui a Mallorca, imagínate a un chico de 19 años. Hagamos lo que hagamos es una prueba para él. El año que viene es futbolista del Atlético de Madrid, este tipo de partidos los va a vivir. Es un chaval que lo tiene que saber llevar, aislarse y hacer su trabajo. Será emocionante pero a lo largo de su carrera va a jugar muchos partidos de alta tensión emocional. Este es el primero, pero tendrá que jugar más. Va a ser una prueba para él”.
