El único gol del encuentro llegó en el minuto 15, cuando Shon Weissman aprovechó un pase preciso de Kamil Józwiak para marcar el tanto que decidiría el duelo
El Granada consiguió una victoria muy disputada frente al Mirandés en un encuentro donde las faltas, los parones y la intensa presión dominaron el partido. El gol decisivo llegó temprano, cuando Shon Weissman aprovechó una asistencia de Kamil Józwiak para poner al Granada por delante en el minuto 15. Con un potente remate de derecha, Weissman colocó el balón en la escuadra derecha, dejando sin opciones al portero rival. Este gol marcaría el desarrollo del encuentro, en el que el equipo visitante controló el ritmo, pero sin poder ampliar la ventaja.
Desde los primeros minutos, ambos equipos mostraron una gran intensidad en cada acción. En solo los primeros diez minutos, se contabilizaron varias faltas cometidas por jugadores de ambos bandos, destacando el protagonismo de Joel Roca y Gonzalo Villar , quienes se vieron envueltos en múltiples disputas en el mediocampo. Las interrupciones constantes frenaron el flujo del juego, haciendo que ninguno de los dos equipos logrará generar un dominio claro.
El Mirandés buscó igualar: pero Granada mantuvo la ventaja
A pesar de verso por detrás en el marcador, el Mirandés no dejó de intentar empatar el encuentro. En el minuto 18, Alberto Reina estuvo cerca de lograrlo con un potente remate desde el lado derecho, pero el guardameta del Granada, Diego Mariño, estuvo atento y evitó el gol. El Mirandés continuó presionando, especialmente a través de Joaquín Panichelli y Mathis Lachuer , quienes protagonizaron varios intentos de larga distancia que, aunque peligrosos, fueron rechazados por la sólida defensa del Granada.
Durante la primera mitad, Ricard Sánchez tuvo una oportunidad de aumentar la ventaja del Granada tras un saque de esquina, pero su remate salió desviado por poco. Sin embargo, el Mirandés seguía buscando oportunidades a través de jugadas a balón parado, aunque sin éxito en los últimos metros.
Segunda parte: defensas férreas y cambios tácticos
La segunda mitad mantuvo la misma tónica que la primera. El Mirandés intentó imponer su juego, pero el Granada supo cómo resistir. En el minuto 68, Urko Izeta tuvo una de las oportunidades más claras para los locales con un remate desde el centro del área que fue detenido en la línea de gol. El Granada, por su parte, realizó varios cambios tácticos para asegurar la victoria, entre ellos, la entrada de Manu Trigueros y Lucas Boyé, quienes aportaron frescura al equipo en los minutos finales.
El encuentro se vio interrumpido por Múltiples lesiones y faltas, lo que hizo que el árbitro añadiera seis minutos al final del tiempo reglamentario. En ese tiempo adicional, el Mirandés intentó con desesperación encontrar el empate, pero el Granada, con una defensa muy compacta, no pasó terreno. Al finalizar el encuentro, el Granada celebraba una victoria sufrida, pero merecida, mientras que el Mirandés lamentaba no haber podido concretar sus oportunidades. El equipo visitante mostró solidez defensiva y supo gestionar la ventaja desde el primer gol.
