El Eldense vivió una noche de emociones encontradas en su visita a Granada, donde un gol en el último minuto selló su derrota por 3-2
El Eldense no pudo romper su racha sin victorias en un partido que parecía inclinarse a su favor en la segunda mitad. La derrota por 3-2 frente al Granada dejó un sabor amargo al conjunto azulgrana, especialmente a su entrenador, Dani Ponz, quien, visiblemente afectado en la rueda de prensa, no dudó en describir el resultado como un “castigo bastante duro para los méritos” del equipo. Y es que, tras seis partidos sin lograr un triunfo, la frustración empieza a calar en el vestuario.
Los primeros 45 minutos fueron un reto para el Eldense, que se marchó al descanso con un marcador adverso de 2-0. El Granada aprovechó un penalti y una jugada de calidad para imponerse rápidamente, dejando a los visitantes sin margen de error. Sin embargo, el inicio del segundo tiempo fue otro cantar. Los azulgranas respondieron con intensidad y orgullo. Los goles de Chapela y Ortuño, en menos de diez minutos, devolvieron la ilusión a la plantilla y a su entrenador, que creían en la remontada.
La decepción de un final inesperado y la valoración de Ponz
La euforia duró poco. Un gol anulado por el VAR a Juanto cambió el curso del encuentro y, como lamentó Ponz, “estuvimos muy cerca de ponernos por delante”. Ese golpe psicológico se hizo notar en el campo, y el control del balón pasó a manos del Granada. La calidad de Uzuni emergió en el minuto 89 con una jugada brillante que selló la derrota del Eldense, un gesto técnico que el propio Ponz calificó como “una genialidad, solo al alcance de jugadores de Primera”.
En sus declaraciones, Ponz también dividió el partido en tres fases: una primera en la que su equipo sufrió para contener al rival, una segunda donde mostraron coraje y se acercaron al triunfo, y una última en la que la pérdida de balón y el talento rival les costaron el partido. “Nos dolió porque trabajamos duro y merecimos más”, subrayó el entrenador.
Seis partidos sin ganar y la presión sobre Ponz
La situación para el técnico se complica. La racha negativa hace que los rumores sobre su continuidad se aviven, aunque Ponz se mantiene firme. “Vamos a seguir dando la cara con la máxima calidad. Hemos tenido mala suerte; hemos hecho méritos en varios partidos para obtener más puntos”. La falta de fortuna, mencionada por Ponz, es una constante en su análisis de los últimos encuentros, donde el equipo ha demostrado competitividad pero no ha logrado capitalizarla.
Por el otro lado, Fran Escribá, técnico del Granada, reconoció que, aunque el empate parecía un desenlace justo, su equipo supo sobreponerse en un momento clave. “Tuvimos más ocasiones para ganarlo”, admitió Escribá, evidenciando la confianza que aún deposita en su plantilla.