El técnico no se esconde y lanza un mensaje claro sobre su continuidad en Montilivi
Míchel no rehúye responsabilidades. Mientras el Girona FC atraviesa su tramo más gris de la temporada, con una racha negativa que amenaza con borrar los éxitos recientes, el técnico madrileño ha comparecido con la claridad de quien no se esconde. A pesar de que los focos apuntan a su figura y empiezan a surgir especulaciones —incluidas las vinculaciones con la Real Sociedad—, el entrenador ha zanjado cualquier duda con una afirmación rotunda: “Mi futuro está en el Girona. Confío plenamente en este proyecto”.
En una rueda de prensa enérgica y sin rodeos, Míchel ha querido cortar de raíz los rumores sobre una posible salida. Asegura que el club, con Quique Cárcel al frente de la dirección deportiva, mantiene intacta la hoja de ruta que los ha llevado a firmar una histórica clasificación a Champions League, y que no va a permitir que una mala racha empañe lo conseguido:
“El proyecto es el mismo desde que llegué, no vamos a cambiar la manera de trabajar por los resultados. Tenemos una identidad clara y no pienso renunciar a ella”.
Girona no cambia de rumbo pese a la crisis de resultados
El Girona solo ha conseguido dos victorias en 2025, lo que ha generado una inquietud creciente entre la afición. Sin embargo, Míchel se aferra al trabajo, al compromiso del vestuario y a una filosofía basada en el protagonismo y la ambición: “En los momentos de dificultad es cuando más firme tienes que ser. Miramos hacia adelante, como siempre lo hemos hecho”.
Lejos de rendirse, el técnico prepara con intensidad el partido frente al Alavés, donde el Girona necesita romper con la mala dinámica. Para ello contará con el regreso de dos piezas clave: Oriol Romeu y Donny van de Beek, que vuelven tras cumplir sanción. La ausencia de ambos fue determinante ante el Barcelona, donde el equipo fue incapaz de plantar cara al despliegue de Hansi Flick. Su vuelta supone un alivio táctico para un Míchel que sabe que no hay margen de error.
Plantilla, bajas y ambición intacta
Pese a la presión y las dudas externas, el técnico sigue confiando en su grupo. A falta de la evolución de Iván Martín, y con las molestias de Bryan Gil aún sin resolverse del todo, hay esperanza en recuperar a Abel Ruiz y Miovski para la batalla contra los babazorros.
En Girona, el mensaje ya está lanzado: ni los malos resultados ni las ofertas externas desviarán el rumbo del proyecto. Y Míchel, lejos de agachar la cabeza, lo reafirma con firmeza: “Aquí nadie se rinde. Aquí seguimos creyendo”.
