El reciente enfrentamiento entre el Girona y el Leganés, que terminó en una ajustada victoria por 4-3 para los catalanes, no fue motivo de celebración para el técnico del Girona
El entrenador del Girona, Míchel Sánchez, se mostró notablemente afectado en la rueda de prensa posterior a la victoria de su equipo ante el Leganés por 4-3. A pesar del triunfo, Míchel expresó que, dadas las circunstancias, no había nada que celebrar . Sus palabras transmitieron la preocupación por el contexto en el que se disputó el encuentro, marcado por la devastación provocada por la DANA. Desde su perspectiva, el partido no debería haberse jugado, ya que, según comentó, es un momento de duelo y solidaridad más que de celebración.
La postura de Míchel destacó al señalar la importancia de empatizar con las familias afectadas. El técnico dejó claro que, aunque no tiene conocidos directos entre los afectados, siente el dolor y el impacto de lo ocurrido en la región, una situación que calificó como dramática y que lo dejó “en shock”. Míchel aprovechó la ocasión para cuestionar la organización del partido, sugiriendo que debería haber pospuesto en señal de respeto y apoyo a quienes atraviesan momentos tan difíciles.
Un partido con un primer tiempo de “nivel altísimo” y un desenlace complicado
A pesar del ambiente sombrío, Míchel reconoció el esfuerzo de sus jugadores, resaltando que los tres puntos logrados fueron importantes. Destacó especialmente el rendimiento del Girona en la primera mitad, describiéndolo como uno de los mejores del equipo hasta ahora. El Girona dominó por completo durante esa primera parte, aunque el marcador se mantuvo empatado al descanso debido a dos espectaculares goles del Leganés que sorprendieron al conjunto catalán.
En la segunda parte, el partido se volvió más complejo debido al desgaste físico y las molestias de varios jugadores. Míchel admitió que, ante tantas bajas en su plantilla, prefirió no hacer cambios adicionales, evitando involucrar a los canteranos en un momento tan complicado. Aún así, valoró la entrega de su equipo, que compitió “de una manera genial”, resistiendo hasta el final.
La fuerza de Arnau Martínez y Miguel Gutiérrez: clave para el Girona
En cuanto a los jugadores, Míchel elogió especialmente a Arnau Martínez y Miguel Gutiérrez, quienes marcaron un gol cada uno y siguen siendo dos pilares en su esquema. Estos jugadores representan para Míchel “anclajes muy fuertes” en el equipo, siendo cruciales para mantener el estilo de juego del Girona a pesar de las bajas por lesión.
Míchel también mencionó el papel del joven centrocampista Selvi Clua, titular en los últimos tres partidos, destacando su gran capacidad posicional y su inteligencia en el campo. Aunque considera que Clua debe mejorar sustancialmente, asegúrese de que su presencia haya sido una bocanada de aire fresco para el equipo en estos momentos difíciles.