Un penalti en los minutos finales permitió que el Girona sellara el triunfo en Montilivi
El encuentro entre Girona y Athletic se disputó con intensidad desde el inicio. El Athletic comenzó generando peligro, pero rápidamente el Girona se mostró decidido a no ceder terreno en su casa, Montilivi. En los primeros minutos, ambos equipos se mantuvieron firmes en defensa, destacando las intervenciones de Gazzaniga y el trabajo de la línea defensiva local. El ritmo del partido no permitía errores, y fue el Girona quien logró abrir el marcador gracias a una jugada rápida que culminó con un centro de Asprilla que dejó a Danjuma frente a la portería.
A pesar del gol, el Athletic no bajó los brazos y siguió buscando el empate. La presión alta del equipo de Valverde incomodaba a los locales, pero fue Gazzaniga quien nuevamente demostró por qué es uno de los mejores porteros de la liga al detener un penalti crucial a Berenguer en el minuto 28. El Girona respiraba aliviado, pero no por mucho tiempo, ya que Sancet aprovechó un descuido defensivo para marcar el empate poco antes de irse lesionado. El partido se iba al descanso con un 1-1, pero quedaba mucho por jugar.
El penalti de la discordia cambia el destino del partido
La segunda mitad arrancó con la misma intensidad. Gazzaniga se convertía en la figura del encuentro, con varias paradas que mantuvieron a su equipo en la pelea. El Athletic seguía presionando y generando ocasiones, pero la defensa del Girona se mostraba sólida y bien organizada, evitando que los visitantes se adelantaran en el marcador.
En los minutos finales, el encuentro se tornó caótico. La expulsión de Paredes y el penalti señalado en el minuto 97 a favor del Girona cambiaron el destino del partido. Stuani, el goleador histórico del equipo, no falló desde los once metros y, aunque Padilla estuvo cerca de detenerlo, el balón acabó entrando. Con este gol, el Girona selló una victoria épica ante su afición, en un partido lleno de emociones y polémica.
Gazzaniga: el héroe indiscutible del Girona
La actuación de Gazzaniga fue clave para que el Girona lograra los tres puntos. El portero argentino no solo paró tres penaltis, sino que también realizó varias intervenciones de gran nivel que evitaron que el Athletic se adelantara en el marcador. Su actuación le valió el reconocimiento de todo Montilivi y el título de MVP del partido.
Este triunfo coloca al Girona en una posición favorable en la tabla, consolidando su buen inicio de temporada, mientras que el Athletic se va con la sensación de haber dejado escapar un partido que tuvieron en sus manos.