Tiene no solo la experiencia sino los conceptos que se quieren imponer en el club de Gerona
Girona sigue sin comprender cómo el destino se ha cebado en quitarle lo que por mérito deberían obtener. Lo último, el ascenso, luego de ir a ganar a Vallecas y caer en su campo para cederle el trono a los de la banda cruzada que vuelven al sitio donde por tanto tiempo estuvieron. Pues bien, las decisiones han empezado a caer, y la primera tiene que ver con su entrenador que ha sido despedido para darle lugar posiblemente a Abelardo.
Cansados de dar ese aroma de frustración buscan solventar un proyecto que acabe con los fantasmas. Francisco ha cumplido con una primera etapa sensacional, equipo veloz, consistente y muy ofensivo. Pero ha carecido de lo más importante que es la personalidad para sobreponerse a situaciones adversas. Tema que ha terminado con sentenciarle a pesar de sus buenas intensiones.
Categoría de más en Abelardo invade las sensaciones en el Girona
No es el único candidato a día de hoy, pero es muy claro que quieren aprender de sus errores y le quieren dar el mando del equipo a un entrenador que sepa manejar los egos, que tenga carácter y que esté preparado. Abelardo aparte de todo eso tiene experiencia, y no solo en la máxima categoría, sino en escenarios que como ese ponen grandes retos sobre la mesa.
Favorece su manera de ver el fútbol, con equipos en sistemas defensivos muy ordenados, que priorizan la contención para ganar confianza y construir en base a ello. Su sistema de juego es el 4-4-2, al que le inyecta velocidad y explosión en los costados haciendo que sus extremos o aleros tengan mucho contacto con la pelota en transiciones.
Además de estar listo, admite gustarle la idea
Y si a esto le faltaba algo, hay que decir que Abelardo es un fiel creyente de sus capacidades. Entiende que con tiempo puede hacer un proyecto estable, como se lo han propuesto en Girona. Quitarse la maldición de encima podría ser lo más complejo, pero esto puede solucionarse con la vía exprés, que es ganarse el cupo cayendo en uno de los dos primeros lugares de la tabla de posiciones.
De momento falta por salir a solventarlo de manera oficial. El club aún no lo define pero es cierto que es la mejor opción a día de hoy. Abelardo recién se ha desprendido de sus obligaciones en el Alavés, y admite tener toda la confianza para tomar ese mando.
