Desde hace tiempo que el míster catalán viene pidiendo un extremo izquierdo de buen pie y en el conjunto colchonero lo ha encontrado. Sin embargo, no le importa que su equipo pierda dinero para conseguirlo.
Los dos extremos izquierdos en el FC Barcelona no tienen a Xavi Hernández satisfecho y ya se lo ha comunicado a Joan Laporta desde hace tiempo. El míster catalán cree que ni Ansu Fati y mucho menos Ferran Torres están cumpliendo con el trabajo específico que se les ha encomendado allí. La solución como siempre es un fichaje que el mismo entrenador ya tiene identificado.
Desde hace un tiempo que a Xavi le viene sonando el fichaje del belga Yannick Carrasco, y ahora que el Atlético lo ha puesto en su bandeja de salidas, no hay dudad que aprovecharán. El problema está en que aún le resta un año de contrato, y el cuadro madrileño le ha puesto un precio de salida no tan alto. Ante ello, Laporta ha dicho que no hay dinero para la operación, pero el técnico tarrasense insiste.
Xavi Hernández quiere a Carrasco sí o sí y obliga a Laporta a hacer una operación desproporcionada
El precio del atacante izquierdo está en unos 25 millones de euros, y Andrea Berta sabe que no podrá pedir más de 20. Lo más racional es que estén negociando al salida del belga entre 15 y 20 kilos. Aunque parezca una suma relativamente baja, el conjunto culé ya manifestó que no tienen el dinero para empezar las negociaciones, y el entrenador azulgrana se ha puesto molesto.
Para no dañar el ambiente entre la presidencia y el cuerpo técnico, el primer mandatario blaugrana ha autorizado a Mateu Alemany a gestionar como sea el fichaje de Carrasco, pero sin usar dinero. Esto quiere decir que planearán un trueque, pero el jugador elegido tiene un precio más alto que el que quiere Xavi. Están a punto de hacer una maniobra que les va a costar caro en el futuro.
Ferran Torres es el elegido por Xavi Hernández y Laporta
Lo más natural que van a hacer desde el seno Barcelonista es cambiar a un extremo izquierdo por otro extremo izquierdo. En este caso el sacrificado que más bien sería la ejecución de un descarte es el del valenciano Ferran Torres. Aunque el jugador no esté contando para el míster y esté en la agenda de salidas, sigue teniendo un precio más alto que el belga.
Al delantero valenciano le restan 4 años más de contrato, y tiene un precio base de 30 millones de euros. Eso sin olvidar que el Barcelona pagó 55 kilos por él en enero del año pasado. En pocas palabras, el club catalán perderá al rededor de 30 kilos con este trueque, y todo por deseo de Xavi Hernández, quien quiere sí o sí a Yannick Carrasco.