Los culés podrían estar forzados a aceptar la posibilidad ante la negativa de negociación por parte del agente del jugador
La transición deportiva y de ideas en el FC Barcelona con la llegada de Xavi al banquillo tiene un toque de expectativa, y en ese punto ha entrado directamente Ousmane Dembélé. El delantero, o extremo derecho tiene la gran oportunidad de empezar su puesta a punto, contando con el respaldo del grupo de mando, aunque en la última semana se ha visto actividad de peligro, liderada específicamente por Tottenham.
Y es que los Spurs tienen claro que van a ir a por el ex del Borussia Dortmund. Según ha podido adelantar un medio inglés, el entrenador italiano Antonio Conte ha aconsejado este hecho, vinculando la posibilidad de poner otro activo en forma de pago. Es decir, van a usar sus recursos para menguar el pago total que se sabe es altísimo. Y en ese orden de ideas el jugador es Bryan Gil, un viejo conocido por estas tierras.
Tottenham busca aprovechar el lío económico con Dembélé para pescar en río revuelto
La situación para los británicos es clarísima. Saben de primera mano que el acuerdo entre el francés y la entidad blaugrana está muy atrasada y buscan establecer una chance concreta para sacar ventaja. Es decir, Xavi ya ha manifestado querer sumarlo a su proyecto, pero la oferta de renovación es para su representante, una verdadera falta de seriedad.
Por lo tanto presiona para que se dilate el tiempo, y quede libre de negociar a partir del primero de enero de 2022. Así pues los spurs le elevarían notoriamente su salario, y le harían un contrato de larga duración poniendo como facilidad el pase de Bryan Gil a cambio. Un tema que por ahora no ha caído bien en Cataluña, y del que se dice se está analizando con lupa.
Xavi no concibe este potencial acuerdo y solicita manejar el tema internamente
Desde su primer contacto con los medios al ser cuestionado por Dembélé su respuesta siempre fue la misma, jugador vital para lo que pretende. De manera que es inviable perderlo, y más en este instante donde las afugias son completas. Entra perfectamente en la dinámica del equipo, y establece patrones de comportamiento fieles a su idea de juego.
La señal ha sido a ofrecer una mejora sustancial, aunque la economía de momento no lo permita. Dembélé es para el míster uno de los mejores del planeta, y se puede consolidar si consigue continuidad en el equipo. Perderlo no solo es grosero con la posibilidad de mejora en lo mecanizado del trabajo del grupo, es un riesgo económico que no se pueden permitir, pues pagaron demasiado dinero en su momento por sumarlo.