Cuando todos lo daban por hecho apareció la voz autorizada del entrenador y del capitán para cerrar el rumor con un NO rotundo
Cuerpo técnico, directiva y especialmente jugadores, han presionado por todas las vías posibles el hecho de contratar un delantero más en la plantilla del FC Barcelona. Perder a su goleador ha sido realmente catastrófico, y en eso ni Setién ni Bartomeu se han mostrado propiamente tranquilos. Han hecho la tarea de perfilar nombres, y han llegado a la conclusión que las características no lo son todo, también el punto de vista económico. Por eso ha quedado descartado Krzysztof Piatek.
El delantero del AC Milan es un punta de mucho talento, de fenomenales características, pero lagunero y destacado por brillar solo por ciertas épocas. En el Barça están hartos de vivir ese tipo de situaciones y por tanto habría sido descartado. No quieren vivir un hecho más como el que les ha hecho pasar Kevin Prince Boateng, y esperarían al mercado que viene una oportunidad de oro para asaltar un nombre con muchos más pergaminos a un precio realmente contenido.
Dicha deliberación tuvo varias posturas, una basada por la necesidad, otra comandada por el deseo, y finalmente rechazada por la objetividad. Messi fue el punto más cruel, Bartomeu analítico y Setién encajando entre las dos vertientes más directas. El caso es que se ha sacado de taco la opción del delantero polaco de 24 años, que si bien tiene futuro, su precio es considerado alto en relación a lo que puede aportar.
Mourinho es el que finalmente se llevaría el gato al agua con Piatek
Como ya se había manifestado el hecho puntual era el económico. José Mourinho ha estado al tanto y tras ver complicaciones en el caso William José, no habría dudado en recomendar a la directiva Spur el nombre del polaco. Por 40 kilos arribaría mañana mismo si se lo proponen, y de hecho se está constituyendo como la alternativa más poderosa.
El tema, y como no ha pasado inadvertido en todos los frentes, es que esta no ha sido su temporada, más allá que llevara dos brillando con luz propia tanto en Genoa como en Milán. Ha perdido titularidad con Zlatan, con Rafael Leao y con Ante Rebic, los inicialistas en esta nueva versión del ‘rossonero’ italiano.
Una muestra más que en el FC Barcelona hay personas de un nivel de influencia importante, mucho más de lo que pudiesen imaginarse. Ahora todo se centra en la reconstrucción del nivel emotivo, el equipo debe asumir el bache con naturalidad, y profesionalismo, el mismo que los debe mantener en pie de acá a que llegue la recta final de temporada donde se definen todos los títulos. Más que Setién, Messi se sale con la suya.
