La oferta va en firme, una pasta que se considera importante para alejar a la crítica del camino
En el FC Barcelona pese a que el tiempo transcurre, no dejan de acontecer ciertos sucesos que maltratan su entorno. El que más, sin duda los descaches directivos, en la contratación de dos valores únicos como son los casos de Ousmane Dembélé y de Philippe Coutinho. Ambos están hoy en la lista de futuribles, con opciones variadas según cada caso.
Tottenham Hotspur, liderado por José Mourinho ya se ha puesto en contacto con la directiva blaugrana y ha pregunta asiduamente por uno de ellos. Se trata del francés de 23 años, que con esta completa ya 3 temporadas en el club catalán. Por él están dispuestos a mover su cartera, con una oferta que llega hasta los 85 millones de euros.
Necesita sumarlo cuanto antes en medio de la crísis y necesidad de puntuar en la tabla
A día de hoy, los spurs han resignado sus opciones de jugar Champions, y se tendrán que conformar con la Europa League. Viendo lo que tiene en su plantilla, parece haber muy poco margen de mejora. Si no están Kane ni Son al cuadro londinense se le complica y mucho, dejando este panorama muy abierto para lo que suena en lugar del ex Borussia Dortmund.
Dembélé, que le costó al equipo catalán cerca de 138 millones, no ve mal el momento para cambiar de aires, y buscar por fin dejar atrás ese legado de lesiones tan molesto. Para el club perder esa suma en la transacción es ahora mismo una posibilidad, por escándalos, y porque además necesitan el efectivo para afrontar otros movimientos.
Los pocos cambios en el Tottenham le incluyen a Dembélé como el movimiento más agresivo
A través de un medio de comunicación en Inglaterra, el portugués ha tratado de ser lo más correcto posible, entregando unas declaraciones esclarecedoras. Equipo tiene y lo mantendrá al menos de cara al futuro. Sabe que la base del grupo no se toca, y que su plantilla está en la edad y el nivel necesario.
Por eso los movimientos serán los justos, aunque lo suficientemente agresivos como para considerar tal aseveración. Está muy claro y ya el Barcelona tiene en sus manos la oferta por Ousmane, la que cree que debe ser su gran acción de verano, junto a la de Coutinho a la que se le sigue buscando doliente. Para Bartomeu es su carta de salvación, al menos para eliminar el estigma que estos acuerdos le han dejado.