El triunfo agónico contra la Almería mezclado con las derrotas ante Girona y el Royal Antwerp tiene los ánimos del club bastante caldeados. Ánimos que terminaron por estallar con las palabras del míster en rueda de prensa.
Es claro que el FC Barcelona no viene bien desde hace tiempo y Xavi trata de hacer lo que puede con la plantilla que le han armado. Pero por otra parte, el egarense es culpable directo por la serie de declaraciones infortunadas que salen de su boca. Y en la última rueda de prensa sus palabras fueron dardos certeros que hirieron el orgullo de los jugadores.
En palabras más concretas, Xavi comparó su actual plantilla con la del 2010 (donde él militaba), y la ninguneo haciéndola ver muy mal. Es verdad que los partidos ante Girona y el Royal Antwerp fueron lamentables, pero sus declaraciones estuvieron un tanto pasadas de tono. De hecho varios jugadores ya están comentando que en cualquier momento la armonía en los vestuarios desaparecerá.
Xavi arremete contra su plantilla y el Barcelonismo se le va encima
“La primera parte es inaceptable y se lo he dicho. No era aceptable la presión y la agresividad. O corremos como animales o no nos llega. No tenemos al Barça de 2010. El año pasado éramos agresivos y teníamos alma. No podemos no darlo todo. O nos dejamos la piel y la vida o no ganaremos nada. Hay que espabilar. Si no llega el fútbol hay que llegar por alma” comentó el míster egarense.
Como si ya no hubiese sido bastante fuerte el mensaje del entrenador, remató con esto. “No estoy cabreado ahora. Me he quejado de la falta de alma de mi equipo. El balón quema y están notando la presión pero tengo que ser más exigente con los jugadores pero también protegerles”. Aunque Xavi no lo quiso decir con malas intenciones, el mensaje se codificó de otra manera, insultante.
No solo la plantilla del FC Barcelona está disgustada con Xavi, su afición también
En un partido donde el club azulgrana debía ganarlo por un margen muy superior ya que se trataba del último de la tabla, terminó muy apretado. Era obvio que la afición se manifestara y lo hizo contra el míster pitando y arengando contra él. En la rueda de prensa el entrenador se refirió a este hecho pero le restó importancia.
“Son normales. No me gustan y yo no he pitado en mi vida pero entiendo a la gente. No nos puede faltar alma. Por respeto al club y al escudo hay que dejarse siempre la piel y en la primera parte no ha sido así”. Lo cierto es que después de estas declaraciones la plantilla no verá con los mismos ojos a Xavi. Se esperan días difíciles en el entorno Culé.