Prefiere a Alejandro Balde y Dani Olmo
El seleccionador alemán, Hansi Flick, ha tomado una decisión que ha sorprendido a muchos: no contar con Nico Williams en su esquema ofensivo. Flick ha dejado claro que no quiere un extremo puro, a diferencia de lo que muchos expertos consideran necesario para su equipo.
Estrategia ofensiva redefinida
En lugar de un extremo tradicional como Nico Williams, Flick planea centrar la proyección ofensiva por la izquierda en Alejandro Balde. La idea es utilizar a Balde para aprovechar su capacidad para recorrer el carril, mientras que el perfil de atacante más interior será cubierto por Dani Olmo. Este enfoque busca liberar el carril izquierdo y crear más espacio y flexibilidad en el ataque.
Flick considera que un atacante interior como Olmo puede proporcionar más variedad táctica y adaptabilidad en el juego ofensivo, permitiendo a su equipo tener mayor control y capacidad de sorpresa en los partidos. Esta decisión se enmarca en una estrategia que prioriza la movilidad y la versatilidad en el ataque, en lugar de depender de jugadores que se limiten a mantener posiciones fijas en las bandas.
4-2-3-1 un esquema similar al de Valverde
La decisión de Hansi Flick ha generado diversas reacciones. Mientras algunos critican la exclusión de un talento como Nico Williams, otros apoyan la visión del entrenador de buscar un enfoque más dinámico y flexible en su juego ofensivo.
Este movimiento también pone en el foco a Alejandro Balde y Dani Olmo, quienes ahora tienen la responsabilidad de demostrar que pueden cumplir con las expectativas del seleccionador y llevar al equipo a un nivel superior en términos de efectividad ofensiva.
Con esta estrategia, Flick busca maximizar las fortalezas individuales de sus jugadores y crear un sistema que pueda adaptarse mejor a diferentes situaciones de juego, lo que podría ser crucial para el éxito del equipo en futuras competiciones.
