Los encargados del club buscan concretar el paso de una estrella del nivel que tiene el alemán de cara a la temporada que está al caer
El FC Barcelona se sigue quedando corto en la posibilidad de identificar jugadores en la zona media del campo como objetivos de este verano. La incapacidad económica adicionado a esa exigencia mayor que tiene el ADN y los puntos de referencia, le han dejado a Setién un quebradero de cabeza que podrían estar finalizando si logran quedarse con la estrella del Manchester City.
Ilkay Gündogan es una de las referencias del cuadro que orienta Pep Guardiola. Tiene todo lo que se necesita para triunfar en la parcela, y tiene la experiencia necesaria para dar un golpe contundente. Le quieren como la fórmula a Busquets, o simplemente para que dé la mano en uno de los costados de ese centro de la cancha gracias a su manejo e inteligencia.
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No es habitual que a día de hoy el Barça cuente con este tipo de factores aliados, ni mucho menos con la referencia de tomarlo como un tema de impacto mayor. Lo que sucede es que en Manchester están en estado máximo de alerta luego que la UEFA y la FIFA ratificaran la sanción al City por el manejo indebido de los recursos que han roto las leyes del Fair play financiero.
Esto les ha dejado dos ventanas fuera de las posibilidades de concretar fichajes, y eliminado pese a su posición en la tabla de disputar cualquier torneo internacional. Jugadores como Kevin de Bruyne ya lo habían dado a entender, y ahora es Gündogan el que se suma a la labor de encontrar hueco en otro lugar donde le den continuidad y le permitan sacar a flote ese enorme estilo de juego que posee.
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Pero toda intensión mayor tiene sus atenuantes y para el Barça es el punto de vista inversión el que más enteros le hace perder. Manchester City pagó en su momento 28 millones de euros, y a día de hoy con su cotización y su nivel, es claro que esto no será para nada el monto que pretenden exigir.
Antes tendrán que darle salida a valores como Ivan Rakitic, Arthur Melo, o Arturo Vidal, para con esas cifras poder atacar sin miramientos el fichaje de Gündogan. No será sencillo pero tampoco imposible, pues además de tener claridad, es fuerte en marca y puede jugar en la posición de Busquets, mucho mejor si se compara con el otro objetivo, el bosnio Miralem Pjanic.
