Uno de los líderes de la plantilla le ha dejado clara su postura, no le soporta
Han sido muchas cosas las que ha tenido que vivir en poco tiempo Quique Setién al frente del FC Barcelona. Duelos, triunfos, sufrimiento y una derrota, la de ayer en Mestalla ante un Valencia que no tuvo el balón, pero que si supo dominar todo el juego. Eso ha sido el acabose, un comienzo del final en apenas un mes que va corrido de año. Pues bien, uno de los capitanes, Gerard Piqué ha destapado una olla, la de la relación con el cántabro que no es propiamente la mejor de todas.
Piqué ha sido foco de seguimiento en las últimas semanas, uno de los veteranos de la plantilla que es por lejos de los más queridos por la afición, y uno de los que más datos adjuntos resulta dejar. Lo último que se sabe es que no tiene una relación propiamente estrecha con su entrenador, es más casi ni cruzan palabras y esto tendría como antecedentes los choques entre Betis y Barcelona del pasado.
Se dijo en su momento que este era un tema al que le trabajarían con tiempo, a medida que las sesiones de entrenamiento transcurrieran y la compenetración del grupo fuera idónea. Pero nada ha servido, Piqué no está a gusto ni con el estilo de trabajo del estratega, ni mucho menos con los conceptos empleados, situación que deriva en muchos temas inconclusos de momento.
Piqué solo espera el momento para dar el zarpazo
Más allá de que no le guste o simplemente no esté de acuerdo, el defensor central de 32 años sabe que no está dentro de sus facultades forzar una decisión a toda luz negativa para los intereses del club. La relación limitada entre ambos no le cierra el ciclo, y espera que todo mejore en la medida que vaya desarrollándose una idea novedosa.
Pero de no ocurrir sabe que la solución está a la vuelta de la esquina, la salida del entrenador es lo que espera pueda solucionar o acabar los conflictos, más que nada porque a su entender un equipo como Barcelona necesita gente de mucha calidad en todas las dependencias. Incluso se ha llegado a poner en tela de juicio su continuidad como jugador del FC Barcelona, tema que no pasa desapercibido ni siquiera por el presidente de la institución.
Así que todo está expuesto, Setién deberá mostrar una mejoría en la clase de fútbol que desarrolla su equipo si es que quiere al menos cumplir los términos de su contrato; no quiere pasar por la misma situación de Valverde. Mientras tanto el equipo se encuentra en una situación crítica, y hoy podría perder la punta de LaLiga si Real Madrid alcanza arañar al menos un punto en su visita a Valladolid.