Lo pone como punta de ancla en esa negociación que tiene abierta con las directivas
Leo Messi tiene una manera diferente de ver el deporte en relación a los encargados de los números y los efectos legales. El capitán del FC Barcelona se ha pasado estos días de para preparándose y ha identificado nuevos retos desde la pantalla chica de su TV. Lo último ha salido en referencia al clásico alemán entre el Borussia Dortmund y el Bayern de Múnich.
En ese juego ha encontrado uno más de sus argumentos para poder establecer una política favorable al club en cuanto a su extensión de estadía. Los jefes saben que a Messi no le deben buscar el quiebre, pues tiene en sus manos el documento que dicta su adiós, sin costo y dejando un hueco irreparable en la estructura del equipo.
La solución al centro de la cancha está clara
Por eso, con los ojos puestos en el Signal Iduna Park ha sacado conclusiones certeras y ya no tienen más dudas, quiere a como de lugar a Joshua Kimmich. El polivalente mediocampista alemán de 25 años ha sido la gran figura del juego, no solo por el gol, sino por lo que ha recuperado, por el despliegue y por aportar casi el 100% de efectividad en sus pases.
En la visual de Hans-Dieter Flick está que se ha convertido en un valor importante. Primero como lateral y ahora como pivote, donde le pongan rinde y por eso Messi está tan cegado con este hecho. Incluso se ha sabido que le ha interpuesto su nombre a los jefes con tal de manejar las cargas y servir de argumento para extender su vínculo. La pulga solicita jugadores de primer nivel y un proyecto estable como fundamento de su estadía prolongada.
Aún restan valores por acordar en el caso Kimmich
Pero que la parcialidad de Messi no se invada sin antes estar sujeta a las posibilidades. Barcelona no pasa por su mejor momento económico y esto le pondría un enorme peso en contra a la hora de manejar las cargas. Bartomeu lo sabe y por eso maneja un bajo perfil, lo que no dice que no estén gestionando el hecho, es más, se sabe que han existido acercamientos pero los valores son muy altos.
Un monto superior a los 100 millones de euros es lo que esperan recibir desde Bavaria por el talentoso jugador que también entrega sus excepcionales presentaciones en la selección alemana. Duro, complejo y casi imposible por ahora, la única es que acepten jugadores a manera de trueque, pero ya lo saben todos, allí no es una política muy bien vista. Atentos.