El FC Barcelona protagonizó ante la AS Roma uno de los ridículos más importantes de su historia. La contundente derrota por tres goles a cero, levantó el aparentemente tranquilizador resultado de la ida. Los italianos fueron superiores de principio a fin, ante un Barça que nunca dio síntomas de reacción. Ni siquiera Ernesto Valverde, quien apuró los cambios hasta que ya era demasiado tarde.
Las consecuencias de la derrota pueden adquirir una dimensión sin precedentes. Las dudas de Iniesta, quien debe decidir entre irse a China o continuar un año más, puedes haberse resuelto. Pero no es el único. El FC Barcelona se teme una desbandada general tras los repetidos fracasos en los cuartos de final de la Liga de Campeones. Messi está roto. Y en tiempos de debilidad los cantos de sirena que llegan de la Premier pueden dinamitar Barcelona.
Samuel Umtiti y Rakitic son otros que manejan numerosas ofertas y no están del todo seguro de querer continuar en el Barça. Incluso Sergio Busquets maneja una oferta del PSG que doblaría sus ingresos actuales. Habrá que estar atentos. Los próximos días pueden ser muy convulsos en las oficinas del Camp Nou. Incluso peor si el Real Madrid continúa avanzando en la máxima competición continental.