Su llegada se podría dar a cuenta de la ineficacia directiva en otros frentes
Pasan y pasan los días, y en el FC Barcelona siguen sin encontrar claridad respecto a un tema directo, el margen de fichajes y sus nombres en concreto. La directiva se ha encontrado con muchos obstáculos que les meten directamente en medio de una lucha sin precedentes, que ya han amenazado con perder.
Eliminados casi de raíz los nombres de Lautaro Martínez y de Neymar, el reto es absoluto y mayúsculo, entendiendo que las necesidades siguen estando a la orden del día. El argentino vio cumplir su cláusula de rescisión, así que para negociar se debe hacer directo y sin puentes. Mientras que el brasileño hace parte de la previsión a futuro de la plantilla del PSG, y su marcha se sitúa por encima de los 200 millones.
La nueva dirección apunta de lleno a Inglaterra con un crack de talla mundial
Era de suponerse, que con estas nuevas noticias, los grandes agentes del mundo iban a saltar a la palestra. El primero en hacerlo ha sido Jorge Mendes, que en su carpeta de jugadores tiene uno que sabe le interesa y mucho al FC Barcelona, es Bernardo Silva. El internacional luso actúa en el Manchester City, y ve para este momento su mejor oportunidad de salir al frente.
No se siente tan valorado en el Etihad, y siente que ha perdido con Mahrez el lugar que por ley le corresponde. Barcelona ha analizado sus opciones y no le ha hecho el feo al tema, tratándose de un jugador con mucha calidad, y sobre todo polivalencia. Tiene 25 años, y sabe que por su enorme técnica puede jugar en cualquier posición del ataque, e incluso tirado el medio.
Bernardo Silva abre el camino, el resto corresponde a los acuerdos institucionales
Una vez expuesta la posibilidad claro que se ha motivado. No ha hecho migas con Pep Guardiola, y critica en extremo su manera de manejar el grupo. Ve que el Barça es un club muy de su ADN, con juego posicional, y de posesiones largas. Considera además que el entorno es favorable, y que el legado de compatriotas suyos como el caso de Deco le han dejado la puerta abierta.
No obstante, sacarlo de Manchester es un reto a toda luz. Cuesta cerca de 100 millones de euros, y además un salario muy alto. En Inglaterra devenga por encima de los 14 millones netos por temporada, y en Catalunya ahora mismo la situación no se presta. Veremos cómo se las ingenia Bartomeu junto a Abidal para poder llevar hasta las últimas consecuencias este hecho.
