Han movido esfuerzos, e incluso han destinado recursos para tratar de convencer al poderoso club inglés
Con Gerard Piqué en el pasado se dio una situación bisagra para el FC Barcelona, que le permitió al jugador agarrar experiencia hasta convertirse en el profesional que es hoy en día. Una fórmula que no ha fallado, y que hoy pretende ser el ejemplo vivo de las futuras transacciones. El elegido para este hecho, Eric García que viene siendo figura en el City de Guardiola.
Sin ir más lejos ayer destacó en su labor durante el compromiso contra el Liverpool, que acabó en goleada a favor de los suyos por 4-0. Durante la reanudación se perfilaba como uno de los nuevos valores, aunque el estrellón con Ederson le terminó marginando. Este canterano culé hoy tienta a sus ex jefes, que ya han dejado ver sus intensiones de rapto.
Eric García acaba contrato y deja a consideración de los directivos su futuro
Una de las principales razones por las que el jugador está siendo foco de la prensa es porque su contrato expira el verano que viene. Desde 2017 ha hecho parte del City y es hasta ahora que ha logrado llegar hasta la cúspide. Se marchó del Barça a cuenta de que no veía aspiraciones de llegar a la primera plantilla, y porque en su momento la competencia era ardua.
Acumula ya 447 minutos en esta edición de la Premier League, recordando que había hecho todo su proceso componiendo la plantilla de su equipo en competencias de menor prestigio. La directiva blaugrana jamás le perdió la pista y hoy está segura de que se trata de un elemento consagrado y que reúne las características que ellos como club deportivo necesitan.
Todo el peso para Abidal y Bartomeu, la re captura del catalán está en sus manos
Para llevarse el gato al agua hay dos opciones, o bien acometer el fichaje con cifras lo suficientemente sólidas, o esperar a que el vencimiento de su contrato se oficialice. Ambas acarrean un riesgo y es la gran demanda que ha crecido en su nombre. Los citizens van por la ruta de la primera, pero saben que no será cualquier monto el que les seduzca y en eso Barcelona cojea.
Su compleja situación financiera no les permite pujar demasiado, más allá que los encargados han repetido estar muy optimistas. Si tienen que esperar lo harán, pero de algo están seguros y es de repatriar a García como el eje de su nueva defensa. Salida limpia, cabeza en alto, inteligencia y velocidad en los cortes. Un zaguero elegante, con todo el ADN Barcelona en sus venas.