Al club le toca asumir el efecto con el pago sustancial de una suma importante
Ayer, el mundo del fútbol presenció una de las escenas más dramáticas del último tiempo. Leo Messi compareció antes las cámaras, en su casa y en medio de un contexto muy relajado y apacible. En pantalonetas y sandalias, el astro argentino de 33 años confirmaba su continuidad por un año más en el Barça, no por gusto, sino más bien por compromiso.
Tranquilo, sencillo y muy claro, ha afirmado que sus razones son estrictamente personales, ligadas a un hecho contundente que es el respeto por la institución. Aunque más allá de los alivios deportivos, hay otras situaciones que tiene al mundo Barcelona corriendo y apurados por lo que esto pueda llegar a representar.
Ahora hay que pensar en los estragos que eso conlleva, que no son pocos
Tenerlo de regreso, genera tantos efectos positivois que el club no ha tenido tiempo de procesarlo claramente. Messi es el jugador más emblemático de la institución, no solo del presente, sino del pasado, y quizás en el futuro. Pero no todo es bueno y así como hoy se frotan las manos, más adelante tendrán que hacer lo mismo a la inversa, gastando y gastando para poder sostenerle.
Una de las principales situaciones es la que presenta el pago de su ficha, la más alta de España, y una de las más altas en el planeta del deporte en general. No será sencillo y menos en estos tiempos asumirlo, más que nada porque el club viene de superar una dura crísis que le ha hecho entrar incluso en el ERTE como medida cautelar y de respaldo en líneas generales.
A los jefes les quedan dudas sobre la reforma de la plantilla
Otra de las consideraciones es que con la edad y la mentalidad del jugador, es muy complejo poder hacer frente a la re estructuración de la nómina. Messi gira en torno a un ambiente amigable, en donde se encuentran piezas como Luis Suárez para que él mantenga su equilibrio. De hecho se ha referido en esto dentro de sus declaraciones, tildando de personas sin criterio a sus jefes para no plantear un proyecto solvente.
Además, la afición no ha reaccionado bien y ha dejado escapar ciertas críticas por su actitud adoptada. Es claro que Messi ha estado impulsado por el momento, para habrá que darle el valor, pues su salida no solo era compleja, sino impagable y acarreaba demandas de por medio. Entorno encendido, posibilidades al caer. Hay que seguir detallando sus respuestas.
