No hace falta decir que el extremo espluguense es el jugador más valioso del club culé, y que por lo tanto no está a la venta ni hoy, ni mañana ni ningún día de su carrera profesional, algo que en Arabia no creen del todo
Una vez más Arabia Saudi pretende llevarse a una de las estrellas mundiales tal y como lo es Lamine Yamal, algo que ha incomodado a Joan Laporta. A pesar de que una hipotética venta del crack catalán, ayudaría en gran medida a la situación económica que vive el equipo, las directivas y en especial su presidente, no están en la labor de vender a su mejor jugador.
Después de la salida de Lionel Messi en el FC Barcelona, es Lamine Yamal el nuevo jugador insignia de la entidad azulgrana. Pensar en vender al jugador de 17 años, es como pensar que el Barça pudo haber vendido a la Pulga en su prime. Algo que nunca pasó y que nunca hubiese pasado. Sin embargo, en Medio Oriente están convencidos de que podrán con la operación.
Los €400M que pone Arabia para llevarse a Lamine Yamal no desvelan a Laporta
El conglomerado de varios equipos en la Saudi Pro League, en asociación con el Fondo Público de Inversión, tienen la firme convicción de que podrán fichar a la estrella catalana, por 400 millones de euros. Una operación sin precedentes, que se colocaría en la cima mundial e histórica, al ser el fichaje más caro, superando con creces al de Neymar por el PSG en 2017, por 222 kilos.
Aún así, Laporta no piensa dejar salir a Lamine Yamal por €400M, menos cuando tiene una cláusula de €1.000M que bajo ninguna circunstancia piensa negociar. Por otra parte, los árabes creen que el nuevo sueldo que le pondrán al atacante, hará que este presione su salida de manera voluntaria. Cabe destacar que el extremo está ganando un salario de 2 millones de euros por temporada.
Otra de las joyas del Barça que Laporta no piensa vender: Es muy amigo de Lamine Yamal
Todos saben que el mediocampista Pedri González es una de las vacas sagradas del FC Barcelona, y por eso la cláusula que tiene. Esta llega a los 1.000 millones de euros, la cual también es llamada “cláusula antijeques”. De manera que el presidente se ha mostrado partidario de vender a su estrella en el mediocampo, siempre y cuando el equipo interesado esté dispuesto a abonar esa suma.
La mayoría de la gente no ha entendido que la afirmación del presidente blaugrana, en mostrarse abierto para vender a Pedri, es una respuesta irónica. Simplemente, nadie va a pagar 1.000 millones de euros, y ni siquiera 500. Por eso el mandatario catalán ha utilizado esta afirmación, pero en el fondo está diciendo que el volante no se irá, y menos cuando está en su prime.
