Relevo generacional con la inclusión de un llamado a figurar en el contexto futbolístico
La llegada de Unai Emery solo ha propiciado la aceleración de los objetivos y el pensamiento de los directivos del Villarreal, que tienen como medida base el hecho de reforzarse en determinadas zonas del campo. Ya han concretado algunas consecuciones vitales, pero han dejado para el final las más acuciosas, como la del defensor central.
A día de hoy el entrenador solo tiene 3 nombres para dos puestos titulares, y uno de ellos está lesionado. La necesidad es evidente, y la aceleración es parte vital de este hecho. Han intentado hacerse de Federico Fazio, pero sin chances reales han dejado todo en manos del FC Barcelona y Jorge Cuenca, el defensor que parece está por llegar a firmar su contrato.
Sin oportunidades de brillar y debutar en primera, lo del submarino amarillo se antoja excepcional
Jorge Cuenca es un zaguero de tan solo 20 años. Ha estado toda su vida vinculado al FC Barcelona, y ha brillado en las categorías formativas del club. Su desempeño ha motivado al club a verle como una figura de exportación o explosión, que hasta acá ninguno de los entrenadores le ha permitido protagonizar.
De ahí que se entienda su deseo por marcharse, luego de varias temporadas esperando en segunda base. El trato sería por una venta definitiva, que incluye una opción de re compra de acuerdo al desempeño del futbolista en el futuro. Para Barcelona es una manera ligera de sumar efectivo, dinero que a la vez servirá para la reconstrucción de su plantilla, tema que tanto ha crecido en las últimas horas.
Jorge Cuenca le abre paso a la oportunidad de pescar en río revuelto a su actual club
Si bien no se trata de una transferencia de alto calibre, si re cubre un tema de vital importancia, el de abrir espacios para fichar en otros campos. El entrenador del Barça ha pedido gestión en dicha zona, pero con un hombre que él considera importante, Jules Koundé. Es el defensor que quiere para pelear por algo grande, ahora que está rindiendo a un nivel excepcional.
El tema es el precio, tazado en 75 millones, lo mismo que Diego Carlos. Por ahora es solo una especulación y una petición del cuerpo técnico comandado pro Koeman. El resto es decisión directiva, revisando las cuentas y los saldos de cada uno en su labor de ser competitivo en el mercado. Mucho por analizar, y varios caminos pendientes por explorar.
